Maito

Servicio y atencion de primera desde que uno llega. El restaurante en condiciones espectaculares. Me gusto e impacto la atencion que tienen con uno ya que no pasa mas de 2 minutos que se te acaba el vaso de agua y ya te lo han rellenado. Las croquetas son una verdadera delicia que a uno se le agua la boca! La corvina con Chupe de Mariscos fue algo definitivamente impactante. Una cama de arroz sumamente delgada con un trozo de pescado grueso bañado en una salsa espesa con base de leche adicional a los camarones y calamares, lo ha hecho simplemente uno de mis platos favoritos.

He ido varias veces a Maito y no me ha fallado. No es para nada barato pero se paga por calidad y se recibe calidad. Fui un jueves en la noche y para las 8y30pm puedo decir que había un lleno total. Es un poco incómodo que adentro del restaurante las mesas a tu alrededor pueden escuchar todo lo que hablas, pero a medida que se va llenando el restaurante disminuye este problema. El servicio es muy bueno, desde que entras hasta que sales, nos costó un poco que nos llevaran agua y nos "refilliaran" cuando se nos acababa pero estábamos comiendo tan bien que no le dimos mayor importancia. De entrada pedimos una pizza de prosciutto y el ceviche frito con hash de platano. La pizza tenía buen tamano, la masa era delgada y crunchie, y tenía bastante prosciutto, muy rica. El ceviche me encantó, buena cantidad para ser una entrada, y excelente acompanado del hash, que era básicamente plátano frito, tipo patacones. De plato fuerte mi novio pidió una entrana que le encantó pero a mi no me mato, venía acompanado de "homemade" platanitos, muy buenos. Pedí un plato de cordero con papines a las hierbas, riquísimo, me hubiera gustado si le quitaran un poco el pellejo al plato pero estaba muy bueno, suave y bien sazonado. Los papines muy ricos, hacían un muy buen complemento al cordero. De postre pedimos un mousse de chocolate delicioso, capa de galleta con caramelo y chocolate, tenía mucho tiempo de no probar un postre tan rico.

Maito ofrece ingredientes y sabores nacionales con un toque exótico y de alta calidad. En nuestra mesa probamos el creativo Chow mein de pato, el pescado entero llamado “Pedro Navaja” (plato ganador que te hace regresar), el Gnocchi de maíz en salsa de guandú con queso blanco, una total delicia y las alitas guayabera en una salsa con toque caribeño sin igual. Importante dejar espacio para el postre. ¡Nos encantó el Geisha Tree Ways que además viene con un “wow factor”! Su terraza es relaxed y tropical. Muy buen servicio y conocedores tanto los meseros como el Sommelier. Nos encantó su recomendación de vino con una cepa inusual que además nos sorprendió y deleitó.

Pedí una entraña como tienen tan buena recomendación, pero me dieron una con más sal en un lado y el otro sin sabor. Servicio excelente muy atento.

El servicio las dos veces que he ido a sido lo maximo, la comida ni se diga he probado varias cosas del menu y puedo recomendar con ojos vendados, todo muy delicioso. Mi restaurante Favorito en Panama! Recomendacion (Siempre hacer reserva por que se llena)