Moró

Restaurante albergado en el Hotel W, El restaurante encaja perfectamente con el hotel, teniendo una decoración y ambiente lujoso y moderno. Los platos son muy bien logrados, una mezcla de sabores rara vez vista, siempre puedes acompañar con cualquier buen vino recomendado por el sommelier. Recomendado para aquellos con paladar exigente.

Excelente ambiente y atención ejemplar. Pedimos de entrada la ensalada de langosta, la cuál venía tibia, delicada y deliciosa con una salsa de yogurt; los principales fueron el trío de atún (mejor plato de la noche) el cuál venía muy bien servido y acompañado de vegetales a la plancha; el otro plato fuerte fue el lomito de puerco, delicioso también. No se lleva las 5 estrellas porque los postres (profiterol y cheesecake) estaban buenos pero algo cargados, tal vez un poco de simplificación en el área dulce les daría algo más único.

Una experiencia diferente. Se llega por el hotel pero hay que preguntar hacia adonde porque no hay buena señalización, por fortuna personas amables en la entrada. La atención buena, siempre estuvieron pendientes de nuestras necesidades. el menú un poco corto, no mucha variedad y en realidad tienen 3 a 4 platos que son los recomendados y que en realidad son buenos, como la ensalada de pera, el pato confitado. Algunos otros platos que pedimos, nada especial. Creo que se pasan un poco con el precio de los vinos pero tienen una variedad adecuada.

Excelente vista y atención. No hay muchas opciones en las entradas y el salmón no lo recomiendo. Los platos fuertes muy bien prestados y ricos, me gustaron mucho los langostinos a la pimienta roja. Los postres y el café estuvieron espectaculares!

El ambiente y lugar buenísimo, acogedor. La atención es excelente y personalizada. Los platos son tipo gourmet. Los platos que probé muy buenos, carpaccio de Pulpo.