La Vespa Vista Mare

Fui con mi esposa, el lugar tiene un buen ambiente, acogedor y de luces tenues. La comida es buena la burrata con jamon serrano estuvo delicosa. De plato fuerte los raviolis y el rissoto a la pescatore normal. Habiamos pedido el rissoto de centollo del menú pero no tenian esa noche. Un aspecto negativo es el calor que hace, por tal razon pedimos vino blanco y no tinto y nos fuimos antes de lo previsto. Nos gusto el restaurante y hubieramos cenado por más tiempo pero el calor fue intolerante, nisiquiera cuentan con ventiladores, no volveremos simplemente por eso.

De entrada probamos Bruschetta Mediterránea, pan rústico tostado con tomate, cherry, ajo, aceitunas kalamata, albahaca. Platos fuertes: Pappardelle Cobia e Polpo, una pasta bicolor artesanal a base de huevo y tinta de calamares salteada con pez Coiba y pulpo, tomate, cherry, pepperoncino y perejil. Fussilloni "A Modo Mio" pasta artesanal en pesto de pistacho y albahaca, chorizo italiano, tomate cherry y queso stracciatella. De postre: Tiramisú Todo estuvo delicioso, la atención 10/10, la vista espectacular!

El sitio es espectacular, me encanto, la atencion fue un plus. En cuanto a la comida, me encantaron las pizzas, pero la picada con langosta, salmón, langostinos, papas, calamares y almejas, un verdadero festín!!!!!!! el precio estuvo un poco alto, pero se pasa muy bien. El mojito fue el único fracaso.

Un ambiente increíble, relajante con vista al mar, los meseros súper amables. Es pet friendly (pequeños y grandes) La comida muy rica, en lo personal me gusta la pizza crispy, si piensas igual pídelo al mesero al ordenar.

Llegas y te reciben con amabilidad, tienen dos áreas habilitadas, una en aire acondicionado y la otra con una vista espectacular, decidimos cenar con la brisa del mar. Cabe mencionar que tienen un chef que va a tu mesa para preguntar si todo estuvo bien, posee una estrella michelin así q ya podrías imaginar con esto lo rico de la comida. De entrada no dejes de probar la burrata q es hecho por ellos y la focaccia, con un antipasto q no le hacía falta nada. Como ya deguste el risotto de hongos, esta vez pedimos de mariscos y simplemente deliiiii, una entraña en su punto y un filete con queso gorgonzola, cada plato más rico que el otro. De postre nos recomendaron el mouse de maracuya, el balance perfecto entre lo ácido y dulce, y la panna cota 😍 te recomiendo probar el vino llamado pasión si pides carnes, y un limoncello para cerrar con broche de oro.... un sitio al q regresaría hasta probar todo el menú