El Santuario (Hotel la Compañía)

La comida en general deliciosa el ambiente exquisito y elegante, es bien relajante su iluminación y la vista, el servicio bastante bueno muy bien capacitados los que nos atendieron. Mi única observación es que los precios de todos los platos están bien razonables para el tipo de restaurante que es pero los precios de las bebidas me parecieron exagerados, cockteles, tragos y vinos ya fuera por botella o copa, y la selección de vinos un poco limitada. En general de lo que probamos ensalada con burrada y el lechón fueron lo mejor!

La comida es buena pero nada espectacular. Lo que más nos gustó fueron las carimañolas de pato, el pulpo de entrada tenía buen sabor pero dejamos la mitad porque estaba duro y chicloso, imposible de comer, se lo dijimos a la mesera y no hizo nada solo dijo “le diré al chef”. De plato fuerte pedimos el rissoto de hongos, rico pero simple y la lechona que estaba buena. El ambiente del restaurante es espectacular y la atención también, sin embargo, luego quisimos dar una vuelta por las instalaciones y el resto del personal nada amable, una nos dijo que no podíamos caminar por ahí y a otro le hicimos una pregunta y nos dijo que el solo estaba para cobrar el valet parking así que no podía darnos información, ambos devaluaron completamente la experiencia.

Amo este restaurante! Todos sus platos son totalmente deliciosos. Mis favoritos son el pulpo Serrano y el ceviche de entrada.

Este restaurante se ha convertido en uno de mis favoritos de todo Casco. El ambiente es super agradable y tienen diferentes áreas. De mis platos favoritos: El pulpo Serrano y el ceviche.

Este es el restaurante principal del hotel y desde que entras el ambiente es perfecto. Pedimos de entrada un pulpo que venía sobre una cama de puré con jamón serrano, yo no les puedo explicar lo delicioso, mejor plato que he probado. Compartimos una paella riquísima y de buena porción para 2 personas. Sin duda regresaría , no tengo quejas.