Calicanto Trattoria

Calicanto... es una propuesta dentro del ambiente del Casco, mi filosofía es no comentar negativamente así que trataré de salvar lo mejor. Esta propuesta me recordó por qué se me hace tan difícil salir a comer los Domingos, La comida muy buena, presentación, sabor, combinación de ingredientes, calidad inmejorable, El local colapsó, bien por ellos, mal por los clientes, faltaba al menos un personal de apoyo, los locales del Casco sabemos que son sitios muy artesanales con poco espacio, más bien para adultos por lo que invito a los clientes a pensar mejor en salidas familiares para los pequeñines que se merecen otro tipo de espacio y atenciones, el local muy mal climatizado. El adiestramiento del personal es básico para un restaurant, por más que queramos complacer a nuestros clientes, si una reserva es para 2 no la puedo extender mágicamente a 4, la falla de un cliente puede correr al resto de la audiencia. Yo, le voy a dar una oportunidad más para una cena en día de semana porque la calidad de la comida lo merece. Agradezco al dueño y chef su discreta pero sentida disculpa por el pequeño caos.

Es una joya en el casco, mi pareja y yo en lo personal nos gusta el lugar por diversas razones. El servicio es muy personalizado gracias a lo pequeño de lugar y lo íntimo que es. Las entradas son muy buenas y la pasta ni se diga. Hemos ido ya como tres veces y la experiencia sigue siendo buena. La variedad de vinos muy buena y los precios accesibles. Les recomiendo la Pasta Fruti Di Mare al oleo y las entras de Bruschettas Mixtas.

Restaurante pequeño, hacer reserva es lo mejor. Ambiente calido y buena atencion. Me lleve grata sorpresa con el panzerotti ya que la contextura (parecida a ojaldre) estaba muy buena con el contraste de su contenido, la pizza calicanto es otra sorpresa por sus bordes rellenos de distintos ingredientes se mezcla con la ensalada de tomates cherry, hongos, lechugas y vinagre balsamico coronado con la burrata en el centro. Full recomendado.

El lugar es pequeño pero por suerte no había mucha gente, por lo que fue una cena muy agradable. El servicio es bastante bueno. La comida, sin duda la consideraría uno de los mejores restaurantes de comida italiana. Pedimos pizzas Marroquina y la Dolomiti, excelente sabor y calidad de los ingredientes. Las pizzas las preparan en el momento y se les nota el buen trabajo, también de entrada tuvimos Bruschettas y una jarra de Sangría que sin duda es la mejor que he probado en la ciudad. Super recomendado!

El lugar es bastante pequeño pero se siente acogedor. Me decline por una pasta fruto di mare y no tenían calamares (deberían preveer esos detalles mas aun si tienen varios platos en su carta en donde ofrecen menus a base de mariscos). Tampoco tenían pasta tipo Linguini, pero nada que no se pudiera compensar con un muy buen sabor. Mi pasta estuvo buena, mas no algo excepcional, sin embargo cubrio mis expectativas .. perooo el plato de mi acompañante "Pasta Alfredo en salsa de camarones" solo le colocaron 5 camarones, mi acompañante salió algo decepcionado del lugar. Del sitio no me gustó la atención, la chica fue amable pero se sentía dispersa y algo enredada y el local estaba a 3/4 partes de su capacidad, tal vez una ayuda adicional hubiese mejorado a tener una mejor experiencia durante esta visita. En mi experiencia un buen lugar para visitar pero tengo aún mis dudas sobre si regresar o no.