Napoli

Un lugar tradicional con buena atención si no está muy lleno, lo que casi no ocurre. La lasagna de pollo o de carne es de la mejor y se puede pedir en bandejas para llevar.

Lugar tradicional de pizzas y pastas. La comida sigue siendo de buena calidad, manteniendo su estándar y relación precio-plato. Esto es así quizá por el volumen que manejan que, a su vez, se convierte en una desventaja al hacer el sitio poco acogedor y bullicioso cuando lleno. También, al ser un restaurante bastante antiguo conservan meseros con mucha antigüedad y experiencia, pero con limitada noción de servicio y atención, cónsona con un lugar de esa categoría.

Es uno de los restaurantes de comida italiana al cual me gusta ir, tiene un ambiente súper acogedor, el servicio es bueno pero cuando está el lugar hasta el tope es algo complicado captar la atención del mesero. La comida es deliciosa para mi gusto y me parece que los precios son accesibles. Amo la lasaña de este lugar. Es un buen restaurante para ir con amigos, familia, pareja, con quien gustes, pasarás un buen momento, sin duda.

Esta vez probamos el vino tinto, almejas y Amatriciana de siempre. Una margarita blue fue lo diferente esta vez. Rica como todo lo que probamos en Napoli.

Ya he visitado muchas veces este restaurante pero no puedo dejar de enviar mi decepción esta vez. Las almejas al ajillo como siempre, extraordinarias. Las mejores que probado en la ciudad. El vino tinto bueno también pero el sabor del pescado al ajillo estaba muy pobre. La presentación también dejaba mucho que desear. Quedé tan decepcionada que tuve que tomar foto para explicar mejor mi decepción. Esos gajos de ajo tan grandes no le van bien. Por el precio, esperaba una buena corvina, pero el pescado ni se parecía. No me gustó su sabor.