De gira con visitas extranjeras, paramos en el Tántalo para enseñarles uno de los restaurantes preferidos en la ciudad! Fuimos ahí en 2 ocasiones, para el almuerzo y para el Brunch. El almuerzo fue rico, el Carpaccio de Berenjenas es un pedido que me encanta! Además comemos el Cake de Corvina y la Parillada: todo muy sabroso y ricamente presentado! Después regresamos para el Brunch: lo bueno del brunch es que no se trata del “brunch” regular donde pagas un precio fijo por Buffet o por un curso de platos que muchas veces no le apetece, pero si puedes elegir las opciones del Menú con precios individuales por plato. En este caso, todo también salió súper rico: el emparedado de croissant, el risoto de quinoa y el pollo hindu. Además que hay las opciones clásicas de un brunch, pero que no pedimos. Por fin, lo único que creo que necesitan mejorar es la cordialidad del servicio. Lo demás, estuvo bien. PS. lugar es "baby friendly".
Platos recomendados
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Precio por persona de: Entrada + Plato principal + bebida SIN ALCOHOL
Precio = Entrada + PLato principal + Bebida
El Tantalo es una buena sorpresa en el Casco! Tiene un ambiente actual y fusión con mucha energía. El restaurante el la planta baja es muy bonito pero se pone lleno desde tempranito entonces mejor hacer reservación. En la azotea tiene un bar con música electrónica con una hermosa vista a la bahía pero llegue temprano para no pagar la entrada! El restaurante es especializado en tapas y hay un poco de todo: vegetales, carnes, pollo, pescados... Precios entre 6,50 hasta 18,00. Los tragos son pocos pero muy bueno y la carta de vino enjuta pero buena y con óptimos precios. El único pecado son los postres que a nosotros no nos tocó pues parecen demasiado sencillos... El servicio de mesa se veía bueno y atencioso, solo el host\hostess estaba muy discordinado lo que causaba una confusión el la entrada y en la asignación de las mesas. El estacionamiento también se ve caótico con las obras en el Casco por eso el servicio de maniobrista ayuda bastante...
Me sorprendió la comida. Es bastante buena. El ambiente es muy bueno a toda hora. El servicio pésimo y deben mejorar.
Decidí desayunar un sábado en este lugar. Ordené un 'open omelette', tenia espinaca, pimentón verde, queso feta y otro queso. Me pareció muy normal, honestamente no lo volvería a ordenar. Estaba acompañado de unas papitas en cuadritos hiper saladas. Mi esposo ordenó un guiso de carne con hojaldra y huevo frito. La hojaldra, nada del otro mundo y la carne super condimentada. La atención estuvo excelente, pero dejo a tántalo para tapitas y su rooftop.
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