Rino's

Have not been to Rino's in over a year. This restaurant has a traditional, comfortable decor. The food was very good. Corvina was fresh and tasty. We were there for lunch. The Executive lunch provided very appetizing choices, very adequate quantity and very low price. Wait service was excellent. Water glasses were kept full and whenever a waiter was motioned for they responded. Food service was prompt and our group of six was served almost simultaneously. However, the restaurant had one destructive problem. The men's lavatory was a disaster. Toilet seats were broken as were the doors. Soap dispenser didn't work nor did the towel dispenser - a roll of paper towel was left standing on top of the waste basket. The floor was awash in water. My main thought was I would not bring my wife there for fear of the condition of the women's room. If the management can correct these conditions this would be a restaurant I would recommend to all for good food and relaxed dining.

El lugar muy bonito, en cuanto al servicio a nosotros nos atendieron muy bien, quizás porque no estaba tan lleno y la comida es bastante buena con respecto a su precio.

Fui una vez, y no me gusto pedí ravioli de queso con salsa de salmón, el queso de ravioli sabia raro, y la salsa estaba bien salada, mi novio pidió una lassaña, tampoco le gusto, al final apenas terminamos de comer, ya esta el mesero allí parado al lado, y nos pregunto si quería la cuenta, nos sentía mal, porque como que nos quieren echar.

Buen ambiente pero pésimo servicio la comida no es nada extraordinario deja mucho que desear más si vez los precios.

Fui a un business lunch con mis hermanos. Entre los platos ordenados de entrada estuvieron los tequeños, sopa de pollo y las BBQ wings. De plato fuerte pedimos spaghetti alla carbonara y spaghetti pomodoro. De las entradas los tequeños estaban bien, la sopa estuvo bastante buena y las alitas estuvieron excelentes, tenían un toque de vinagretta que le daba a la salsa BBQ un giro diferente. De los platos fuertes, las salsas carbonara y pomodoro estuvieron a la altura de lo esperado. El servicio fue presto y amable, con conocimiento de la carta y bien atento para rellenar las copas de agua. El ambiente es elegante, pero ameno: da para que uno pueda sentarse a una comida de negocios, una comida en familia o con amigos, o bien para una comida romántica en pareja. Muy buen lugar, con precios acordes en la mayoría de los platos. Sin duda que el business lunch o el buffet de pastas en almuerzo lo hacen aún más atractivo. Recomendable.