Buena ubicación con muchos estacionamientos, pero el menú no es muy variado y la relación precio/producto es algo caro. Pedimos las boneless de langosta lo cual fue una decepción, no se sentía el sabor de la langosta además que la porción es pequeña y probamos la Louisana Bowl parece mas un bowl de cascaras porque de carne muy poco o casi nada. No repetiría otra visita.
Platos recomendados
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Precio por persona de: Entrada + Plato principal + bebida SIN ALCOHOL
Precio = Entrada + PLato principal + Bebida
Empecé a ir a este restaurante durante el inicio de la Pandemia, de hecho solía ser por delivery, había sentido cierta baja en la calidad en general, sin embargo hoy todo fue malo. Demoró más de 25 minutos la comida y habían 6 mesas ocupadas de aproximadamente 10 mesas, no estaban al 100% de aforo. La atención de las meseras de poco ánimo y no tan servicial como solía ser, te sientes como que todo es un pesar y como que quieren que termines de comer rápido y no hay empatía. sobre la hamburguesa, buena carne, buen tamaño pero el pan super suave y mojado en la salsa que se soltaba y no mantenía una estructura de hamburguesa. Vasos con hielo super pequeños y lo peor de todo fueron las colitas de langosta que las conocemos de cuando eran de un tamaño prudente pero hoy eran 4 unidades solamente y micro colitas, era como que eso era la ñapa de un plato principal que nunca llegó y las colitas de langosta más delgadas que un dedo meñique y a parte fría la comida, le pedimos que la calienten y no de la mejor forma la retira la mesera y al regresar estaba igual de fría. Cómo un lugar con tanto potencial puede ir decayendo tan rápidamente por tantos temas tan básicos de calidad de servicios, comida y atención a sus clientes.
Varias veces he ido, pero esta vez fue la peor de todas sin duda. pedí el mix y las costillas y frías y las colitas de langosta también, que de hecho el nombre en diminutivo esta super bien puesto porque eran MINIMAS, mas grande era es un camarón regular. Como ven en la foto, la papita es mas grande que la colita. Ni hablar del servicio, todas las chicas como con pereza de trabajar, que mal de verdad que algo tan bueno y único en Panamá esté decayendo.
El ambiente está normal por lo menos tenían una buena película puesta en la TV, en la atención dejo mucho que decir la mesa que nos atendió al parecer no le gustó la decisión de solo tomar agua y lo reflejo vibrando los ojos y ignorar la petición al final nos terminó atendiendo otra mesera , la comida demoro en salir, la comida nada que ver el BOWL era más cabeza que cola de langosta y x el precio no me pareció nada justo
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