Piano Bar Panamá

Me gustó el local, tocan piano y a cierta hora empieza un karaoke, la música esta demasiado alta y era imposible hablar, pero cuentan con una terraza amplia y bonita. Pedimos algunos platos que no fueron mucho de nuestro agrado como unas huevos rotos con jamón serrano el cual las papas estaba muy duras igual q el huevo, la paella le falto un poco de sabor, las croquetas de jamón serrano si son deliciosas, los tragos estaban buenos al igual q los camarones al ajillo.

Compre un voucher de oferta simple por una oferta donde ofrecían entrada, plato fuerte y postre, debo decir que la atención desde el momento de hacer la reserva hasta el final de la cena estuvo muy bien. Buena calidad y cantidad de comida. Recomiendo la sangría rosada. El lugar es acogedor y se siente cómodo. El día que fui había música en vivo. Realmente me gustó la experiencia, volvería para probar otros platillos.

Me parece muy buen lugar fuimos atendidos como reyes cuando llegamos se lo agradezco. En cuando la comida pedimos unas chiztorras y unas hamburguesas y nos las saboreamos. La hamburguesa con un buen sabor y aroma, y la cantidad perfecta con sus yucas. Pedimos pastel de queso la porción es generosa sabrosa solo me faltó más de fresa para acompañar el pastel. Las sangrías estaba deliciosa también.

Tuve una experiencia increíble en Piano Bar. La comida fue deliciosa, cada plato estaba lleno de sabor y cuidado en los detalles. La atención fue excepcional; el personal fue atento y amable en todo momento. El postre fue simplemente espectacular, uno de los mejores que he probado. Definitivamente, regresaré con mis amigas para disfrutar de otra velada aquí. A mi mamá también le encantó muchísimo, fue un gusto poder compartir un momento tan agradable en un lugar tan especial. ¡Muy recomendado!

Este restaurante tiene muy buen ambiente, los cocktails son muy ricos y la atención del personal es excelente!! Pedimos uña croquetas de jamón y unos garbanzos con chorizo, que estuvieron muy ricos pero lo mejor fue la crema catalana de chocolate blanco