Sabado por la noche,nos apetecia un trago y picar algo,optamos por volver a este sitio.Nunca nos queda mal.
Queriamos disfrutar del aire libre y optamos por la terraza,pero salimos "espantados",era un ambiente extremadamente contaminado,el humo de los cigarrillos nos corrio.
Lastima,por nosotros,pero de verdad es materialmente imposible permanecer alli,si no eres fumador.
Ya adentro,ordenamos un Malbec,para disfrutar de la exelencia de ese producto Gaucho,la chica nos trajo un Merlot,al reclamar nos respondio que era lo mismo,evidenciando su total desconocimiento enologo.Al requerir la presencia de una persona,un poco mas versada,un mozo,nos atendio complaciendo nuestro petitorio.
Mozo,que sin ser cordial,por lo menos sabia atendernos.
Ordenamos,ensalada con higos y queso de cabra,la cual estaba exelente,unas berenjenas parmigana,almejas al ajillo y tequeños,quedando como siempre complacidos.
El Paladar,nos deja,como siempre,contentos el paladar.
A el momento de la cancelacion,la cuenta no presento ningun tipo de inconveniente.
Un sitio al cual siempre regresamos,a pesar de sus deficiencias.
