Moró

Estaba buena la comida el servicio muy atentos siempre explicaban de que consistia cada plato y la opinion de que nos habia parecido, dieron buenas recomendaciones.

Desde que llegas al hotel hasta que te vas te consienten en cuanto a servicio. El restaurante tiene una decoración impecable y moderna. La comida es deliciosa, probamos la ensalada de peras, el carpaccio de pulpo, la ensalada de kale (con nance) y los rollos de langosta como entrada. Los platos fuertes fueron los langostinos, langosta, lasaña vegetariana y el pato confitado. DELICIOSO todo. Sin duda volveremos.

Muy menú y servicio. Sobre el postre, este son muy interesantes ya que tienen su propio chef pastelero. Se los recomiendo para todo tipo de ocasión

Una propuesta culinaria creativa. Ejecución muy cuidada. Ambiente genial y vista maravillosa. La atención es de primera. Definitivamente una experiencia digna de repetir.

Un ambiente muy cálido, excelente atención, la vista desde el restaurant de la ciudad hacen el perfecto complemento para disfrutar una excelente comida. Como entrada probamos el atún, super rojo en el centro y un pequeño crust alrededor con un toping de aguacate y papaya, excelente combinación. La otra opción fue el pulpo a la parrilla, con su sabor ahumado y acompañado de una salsa de ají y unos cubos de papa, excelente sabor y muy buena presentación. Plato principal la entraña a la parrilla, nuevamente la presentación muy original, la carne super suave y al punto sobre ella un topping muy fresco de pimientos, ajos y hierbas que resaltaban el sabor de la carne. El otro plato principal fue el Guacho de coco y azafrán, para morir en el acto, decorado con unos tentáculos de pulpo, el arroz super cremoso con esos toques de coco y mariscos completaron una Noche fabulosa. Todo esto lo acompañamos con un espumante de Bottega, no es lo tradicional pero misión cumplida.