Mentiritas Blancas

Me encanta este lugar. La comida, la atención, los precios, los conversatorios, todo. Lo único que voy a joder y es full joder: pa los manes que no queremos mearle la tapa al baño, es imposible dejarla arriba y hay que recurrir a técnicas casi karatecas.

Buena ubicación, comida excelente, rápida atención, plan perfecto para desayunar con amigos. Llevar niños no es buena idea, es pequeño.

Magnífico ambiente, la musica siempre relajante, diferentes espacios. Es ideal para trabajar. El capuccino delicioso, siempre pido grande para no quedarme con ganas. La pastelería riquísima, las galletas suavecitas, frescas. Probé la empanada Capresse y me encantó!!!

Fuimos a conocer este sitio es cool, la comida normalita, pedí un derretido de pan campesino me pareció demasiado pan y poco queso en comparación con el tamaño del pan, el café agradable para pasar un rato.

Amo mentiritas blancas, desde el primer día y, me gusto mucho, los cafés, desayunos y su atención, recomendado full por ciento