Madero

Cenar entre semana es tranquilo, pocas personas, amplio estacionamiento De entrada unas chistorras no es la típica argentina... la salsa reducción ron abuelo estaba a otro nivel La fabada asturiana mi favorita con el tocinito rico El pollo a la canasta de mi señora estaba normal los patacones buenos El albariño recomendado El servicio muy atento y profesional como siempre

Muy buen ambiente con las mesas espaciadas permite conversar si es reunion de negocios... Los desayunos recomiendo los huevos poche los hacen al punto... Los emparedados con excelente pan y carnes frias... Cafe y tes muy aromaticos... El servicio muy atento aunque se distraen algo... Amplios estacionamientos muy importante para este area...

Lindo lugar y un gran menú, tiene muchas opciones en la carta para escoger. Los platos tienen buena porción de comida. La atención es atenta y rápida.

Tuvimos una mala experiencia gastronómica y, suponiendo correctamente, al final supimos que el chef de cabecera no se encontraba. Como sugerencia al restaurante, es mejor decir que ciertos platillos no están disponibles, que jugarse la imagen ofreciendo platos mal preparados. Como entrada, el pulpo a la gallega, estaba pasado de cocción, y no tenía un ingrediente fundamental de la preparación a la gallega, como lo es la sal gruesa; lo debimos haber devuelto, pero no lo hicimos, esperando que los siguientes platillos mejoraran. La siguiente entrada era tartar de atún, que estaba bueno. Entre los principales, una corvina a la vasca, que estaba muy gustosa. El siguiente plato fueron unos langostinos a la thermidor, en los cuales la thermidor era de muy mala calidad; esta salsa tiene como base una bechamel que se mantiene fundida, pero, en cambio, la base de la que nos sirvieron era queso mozzarella, que rápidamente se cuajó, dañando el platillo entero. Devolvimos los vegetales salteados porque en realidad eran hervidos; no los pudieron componer, quedaron muy lejos del gusto y textura del salteado. Nos ofrecieron un pequeño descuento por los inconvenientes, que no compensa la experiencia.

Amplio y cómodo café restaurante, para tener reuniones familiares y de negocios. La comida es buena y la carta variada. Si logra sentarse al lado del ventanal del fondo, disfrutará de una magnífica vista del parque.