La verdad hace rato quería ir a este lugar y la experiencia estuvo 6/10. Al llegar el señor José Luis nos recibió de una manera excelente y cálida, nos llevó a nuestra mesa en el rooftop y todo lindo, la vista, la mesa, increíble. Todo se vino abajo cuando fuimos atendidos por el muchacho Richard, quién se notaba agotado (aunque no tenemos la culpa) y fue bastante frío y tosco al momento de atendernos, e hizo que la experiencia decayera, incluso nos trajo la entrada y el plato fuerte a la vez y prácticamente nos estrelló los platos y jamás los retiró hasta que terminamos todo, muy feo, me dieron ganas de irme, pero me contuve. Olvidando eso, ordenamos de entrada un ceviche de combinación que estaba RIQUÍSIMO!!!! fresquito y con unos toques deliciosos; de plato fuerte una pasta en salsa blanca con pollo y un rissoto con carne; la salsa blanca deliciosa, muy rica, pero sentí que el risotto estaba como frío y sin sabor, más o menos. Lo acompañamos con jugo natural de fresa que estaba muy bueno y la piña colada 10/10!!! Volvería para pasar un buen atardecer, y probar otros platos, pero ojo con la atención, le puede bajar la buena experiencia a la gente