La Fisheria Rooftop (Causeway)

Nos encantó el lugar, la vista increíble, la comida estuvo bien, picadas para compartir, la atención fue muy buena. Excelente servicio

La Fisheria Rooftop (Causeway)

Agradecemos su tiempo para contarnos su experiencia Sra. Laura nos regala satisfacción saber que logramos de su estancia una velada única. Nos esmeramos diariamente para este siempre sea nuestro resultado, clientes felices y satisfechos. Regrese pronto para que deguste de nuestro amplio menú. Estaremos felices de recibirle. Feliz día.

un lugar muy bien ubicado, con un servicio muy lento y mala calidad de comida. Pedimos un tartar y otras picadas y la calidad del pescado (el corte) pesimo

Seré breve, la comida no tenia la mejor sazón y para gustos de los colores, se puede decir que venía en pequeña porción, los cócteles si estuvieron muy ricos

Amo la vista de aquí, cenar viendo el mar. La comida es rica y el personal es atento, solo que demora un poco la comida y las porciones vienen algo pequeñas

La Fisheria Rooftop (Causeway)

Sra. Angélica, agradecemos su tiempo para contarnos su experiencia como también agradecemos sus observaciones y sugerencias, esto nos ayuda a mejorar. Para nosotros es gratificante saber que su experiencia gastronómica fue excepcional. Regrese pronto estaremos felices en recibirle.

Al ser un restaurante de mariscos, pedimos sólo eso. Para empezar, ordenamos una bruschetta de mariscos y una jarra de sangría tinta. La bruschetta estaba muy bien y el pan suavecito. La sangría estaba demasiado dulce y le faltaba alcohol. Hicimos el comentario al mesero, que se llama Glenn, y él nos llamó al encargado. Henrry nos dijo que su sangría estaba bien en el nivel de dulce pero que iban a evaluar agregarle más ron para balancear. No nos cambiaron la sangría y en cambio nos ofrecieron que pidiéramos otra bebida. Pedimos entonces una botella de vino tinto de la casa, aunque no hay variedad. Ese vino estuvo un poco soso. El plato fuerte fue una picada del mar que es para 2 personas, aunque el menú diga 3. Vino con muchas conchas de almejas y mejillones vacías. Por otro lado, las arañitas, camarones y langostinos tenían buen tamaño y en general todo tenía buen sabor. Cuando pedimos la cuenta sí nos cobraron la sangría y el encargado lo que ofreció fue no cobrar la propina por el problema de la sangría. Totalmente inapropiado querer perjudicar al mesero, quien hizo un trabajo excepcional, por un problema que no tenía nada que ver con él.