Istmo Brew Pub (San Francisco)

Muy buen lugar para un par de pintas o tragos. Variedad con precios muy accesibles. Recomiendo la sangria y cervezas.

El ambiente es como para ir a conversar un rato y tomarte un par de cervezas, se llena bastante lo que hace que la atencion por parte de lo saloneros se haga mas lenta. Las cervezas no estaban muy frias que digamos imagino por la cantidad de personas.

El lugar está cool y es un buen lugar como para relajarse en el medio de la ciudad, pero las pintas no estaban buenas, estaban súper flat. El servicio no fue para nada bueno y las mesoneras no sabían explicar sus propias cervezas.

Buenas cervezas, la comida también. Se pasa agradable, solo han subido un poco los precios con respeto a meses antes. Por lo demás es buen sitio. Solo deben hacer su área para fumadores

Otra mala experiencia. Fuimos a TRATAR de celebrar un cumpleaños y fue fatal. Llegamos a eso de las 7:30 éramos más o menos 13 personas y fue no se si de reír y rabiar. Íbamos todos con hambre porque no habíamos cenado. Pedimos unas cervezas, que tienen buena variedad pero a exagerados precios y encima casi todas venían calientes. Nos trajeron el menú y pedí unos patacones que se veían muy buenos creo que con mariscos y me dijo la mesera que patacones no había. Como el lugar estaba un poco lleno decidimos no complicarnos y pedir pizzas. Una pizza cada uno y para picar mi novio y yo pedimos unas arepas porque el hambre ya me atacaba. Bueno cuando vino la chica muy moderna con una tablet para tomar el pedido, resulta ser que había que escribir rápido porque sino el sistema se cerraba y como éramos 13 personas fue un lío porque a cada rato se le cerraba. Después de varios intentos optó por buscar pluma y papel. Las pizzas demoraron, y no exagero se los juro, 2 HORAS. Si se preguntan por qué no nos fuimos? No nos fuimos porque todos teníamos hambre y solo pensar irnos de allí, buscar otro restaurante, para luego esperar, uff preferíamos ya esperar allí sentados. Cuando por fin salieron traían una o dos y las otras nada que llegaban. Nos trajeron una que nadie había pedido y aun así, del hambre la iba a aceptar uno de los chicos pero un joven en la mesa de al lado que también llevaba horas esperando, la reclamo como suya. al final cuando por fin pudimos comer todos, pedimos las cuentas por separado y fue otro caos. Esperamos como media hora más para que trajeran las cuentas y yo en lo personal di mi tarjeta y le dije a la chica que no me añadiera propina porque sentía que no era justo para mi pagar por tan mal servicio y al traerme la factura vi que si me la había cobrado. Tanta fue mi molestia que le dije que me devolviera mis dos dólares porque no les iba dar propina por semejante mal rato. La chica dijo que no podía darme lo hasta que viniera el gerente, quien vino unos minutos después a ofrecerme disculpas y a devolverme mis dos dólares. Esa fue mi experiencia en este lugar, que no recomiendo para nada. Ah el ambiente siempre hay un escándalo terrible que se escucha hasta los edificios cercanos.