En la Fonda

Un buen lugar para degustar comida típica panameña. Un ambiente agradable y típico. Buenas porciones y amabilidad del personal. Quiero regresar a mirar el show que presentan.

Ambiente bastante tipico (toda la decoración), el desayuno muy bueno, igual que la porcion. No soy de tomar mucho cafe pero el de aqui me gusto. Muy amables y atentos en todo momento. Volveria para ver igualmente las presentaciones tipicas que tienen.

A primera impresión, la decoración llama la atención, muy típica. Los chicharrones glaseados exquisitos, las torrejitas y la limonada con raspadura buena. Excelente atención de Heidi, pero en general deben mejorar para que coordinen bien y puedan atender en orden de llegada y no de primero al que pide sancocho.

Lugar ameno con buena atención, la decoración con la música típica y el “diablo rojo” dentro del local es lo máximo. Pedimos unas torrejitas de bacalao y si bien la presentación es buena, las torrejitas estaban chiclosas y sin sabor. Pedimos unas carimañolas de carne (porque tienen varias clases) y estaba bien en el medio, tuvimos que mandarlas a la cocina y nos trajeron otras calientes pero llenas de aceite. Mi esposa pidió chorizo tableño encebollado con fritanga (2 elecciones) y estaba rico, solo que le dieron como media libra de cebolla y como 4 pedacitos de chorizo. Yo pedí salchichas guisadas con hojaldre y debo aceptar que estaba delicioso. De tomar pedimos unas limonadas con raspadura. Una experiencia no tan agradable para el precio.

Es un lugar único en la capital, un spot fundamental para llevar a alguna visita del exterior y que conozca la singularidad de las comidas de fondas del interior. Definitivamente el sabor no es exactamente el mismo al de una real fonda pero se acerca mucho. La atención es buenísima y de verdad que decoración es muy buena.