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Desde que abrio ha sido uno de mis restaurantes favoritos por el ambiente, la calidad de la masa de la pizza (la margherita con mozzarella di bufala es perfecta) y por los meseros...se nota que han recibido un entrenamiento de verdad, de primera. Buenos vinos y la panna cotta primera vez que la pedí me pareció la mejor que había probado fuera de Italia. Esta última visita no fue la mejor lastimosamente. Pedimos una de las pizzas vegetarianas y aunque se nota que están usando ingredientes excelentes le faltó sabor (no sé si quizás se les olvidó algún ingrediente?), muy insípida aunque como siempre la masa de verdad es la mejor de Panamá. Las entradas muy ricas, excelente presentación, aunque algunas son verdaderamente microscopicas. La atención tampoco fue la mejor, comparado con otras veces...los meseros no estaban muy pendientes de nuestra mesa y asi me da pereza cenar afuera...no deberia sentir que estas laborando por que te atiendan...para eso me quedo en casa y hago el trabajo de cocinar. Ojo, no estaba lleno el restaurante y sobraban meseros. Hay que reconocer que, como siempre, eran muy amables cuando al final venian a la mesa o los llamabamos para pedir vino etc (digo...de alli debe salir gran parte de sus ganancias asi que nunca deberian perder la oportunidad de ofrecer otro vinito!) Pero no se, igual como que te deja sin ganas de volver. Nos pareció que atendian mejor las mesas grandes, las parejas (no creo que lo hagan adrede pero hay que estar anuente). Al final de la noche también sentimos que nos apuraban un poquito aunque aun habían mesas ocupadas. Parte del entrenamiento deberia ser nunca mostrarte impaciente con el comensal, ya sea porque se demore en decidir que va pedir o que haga preguntas sobre el menu. La panna cotta tenía menos salsa y solo una frambuesa. Mejor cobrar mas si es necesario y hacerla de lujo, como antes. Al final de la noche cuando el valet me entregó mi auto me di cuenta enseguida que habia cambiado la radio del "aux" de siempre a una estación de radio. Quisiera pensar que ponchó algun boton por error...no que estaba paseando o sentado escuchando radio en mi carro! Uno quiere pensar que cuando entrega el auto solo lo estacionan, con cuidado, nada de relajo. No me molesta que muevas el asiento pues a veces es necesario, pero bueno... Escribo tanto, no porque quiera influenciar de forma negativa a los que leen estas reseñas. Al contrario...es un restaurante tan singular, con estandares tan altos, que no quisiera verlo decaer (como a veces pasa en Panamá, cuando haya pasado la sensación de novedad, y la gente haya descubierto restaurantes nuevos). Para mi al igual que para muchos son las cosas pequeñas que me hacen decir "probemos algo nuevo!" la próxima vez que salga. Todo esto dicho, sigo pensando que es uno de los mejores restaurantes en Panama.
