A-banda

Restaurante pequeño, con mesas para unas 30 personas máximo. Disponen de terraza interior, dónde nos sentamos nosotros. Tuvimos la suerte que había un poco de brisa e hizo nuestra estancia, muy agradable. Éramos 4 y pedimos como entrantes: croquetas de la casa (muy ricas), patatas bravas (la salsa no me pareció brava y además era escasa), jamón ibérico (rico), almejas en salsa (la salsa lo mejor) y mejillones en su salsa también (aquí fallaba la salsa). Acompañamos de "pa amb tomàquet" y pan tostado. El pan estaba muy bien. Después pedimos una paella de mariscos de 3 para los 4. Salieron buenos platos pero fue nuestro fallo no haberla pedido para 4. El vino fue un Santiago Ruiz de las Rias Baixas, un blanco suave y afrutado que acompañaba muy bien. En general el servicio fue bueno y atento, muy simpático todo el rato con nosotros y con todo el mundo, se agradece.

Volvimos para confirmar la primera experiencia. Aprobado. Compartimos piquillos con atún, patatas bravas, queso machego y jamón con huevos rotos, como entrantes. De fondo cada cual fue a lo suyo: salmón, albóndigas y puerco asado. Volveremos.

Un rincón de España en Panamá. Lugar acogedor y trato excelente junto con los sabores de la península. Realmente te sientes como en casa.

La experiencia que tuve en este restaurante ha sido increíble. Primero, la comida estaba deliciosa. Segundo, el servicio es buenísimo, siempre atento y carismático (¡hasta una de mis acompañantes se puso a bailar sevillana con el mesero!). Y por último, el ambiente era muy agradable. Recomiendo este restaurante, sin duda uno de los mejores restaurantes españoles de todo Panamá.

Excelente para tapeo muy buena la sangría Lo recomiendo buen pulpo a la gallega el Brice frito es excelente Buena terraza para grupos.