Bruschetta

El lugar esta céntrico , limpio y amable la atención , de entra pan con ajo y almejas al ajillo riquísimas , la sopa que me hijo tomo le encanto , yo pedi la parrillada para 1 persona la carne y el pollo estaban perfectos solo que el chorizo es pequeño, mi esposa pidió una pasta con pulpo super buena , muy buena experiencia

Le pido encarecidamente al dueño que entrene a sus meseras para dar una mejor atención. La falta de atención nunca es culpa del mesero, corresponde al dueño entrenarlas.

Este restaurante está ubicado en el pueblo de El Valle de Antón. Me pareció acogedor con un clima perfecto. El desayuno estuvo bueno al igual que la atención. También ofrecen platos fuertes en el almuerzo y cena.

Fuimos porque era uno de los mejores en el área del valle pero no nos sorprendieron nada en lo absoluto. Todo fue bastante básico. La comida estaba bien. Pero no era nada que te sorprenda. El servicio está bien. No lo recomendaría y tampoco regresaría. Intentaría otra opción.

Me quede en hotel que forma parte el restaurante por algun motivo no sirven a las habitaciones. (Que raro. Mi habitacion a 2 pasos de la cocina). El olor de los condimentos y mezclas me atrajeron mucho que decidi cenar en el mismo. El local es muy concurrido. Pedimos unas almejas al ajillo cuya ajillo estaba bien en especies y mezcla. Eso si muchas conchas sin almejas pero es algo que pasa mucho rn los restaurante de Panama. Decidimos probar su especialidad las broshettas muy buenas por cierto serian mejor si le bajaran un poco el oregano. Solicitamos 2 vasos de jugos hechos por la casa creonque los hubiera apreciado mucho si nk le hecharan tanto hielo al vaso. No se los restaurantes deben comprender que uno quiere degustar su jugo y no el hielo con el cual se diluye el sabor. La atencion fue lo que menos me gusto. Le informe sobre mucho hielo en mi vaso se dio la vuelta y se fue. Pareciera que soy un pedido no un cliente. De todas maneras mañan ire nuevamente para ver si cambio de opinion. Desde que empece a escribir y aun no me llega