Primero nos fuimos por las arañitas con spicy mayo, parmesano y ajillo, perfecta combinación de sabores. De plato fuerte las sticky-smoky ribs estaban de otro mundo y el filete de res con salsa de hongos trufados y risotto de queso parmesano, que volvería por el.

empezamos con unos dumplings de carne cortesía de la casa, seguimos con el tartare di manzo e tartufo y el risotto de langostinos deliciosamente perfecto. regresaría para seguir probando sus otros platos que nos faltaron.

En este restaurante tienes que pedir la terraza, buen ambiente con una vista de la bahía espectacular. De entrada nos fuimos por 2 que no pueden fallar y que estaban muy buenos, los dátiles rellenos y los dumplings de camarón. Para el plato fuerte pedimos el filet mignon que llego muy seco, aparte venía con una reducción de res y champiñones que se cocinó de más. Lo mejor fueron los conchiglioni de shortrib en fondant de queso fontina, los pediría mil veces.

fuimos a celebrar un cumpleaños, eramos 8, pedimos picadas y algunas bebidas, ambas demoraron demasiado. Los patacones no dejan nada bien a los panameños y ni hablar de los chicharrones que les falta mucho para estar buenos. Las arañitas estaban fritas en un aceite bien pasado de quemado y el tamal de olla le faltaba bastante cocción. El saos demasiado picante y el ceviche con un sabor muy mariscoso.

esta vez fuimos por el desayuno. increíble! full recomendado. el omelette japones es de otro mundo y los miss-ú geisha fluffy panckes están donde mueren las palabras

Tercera vez que visitamos el restaurante y sin lugar a dudas lo recomiendo! Todo lo que ofrecen es muy rico. No dejes de probar el tasajo de cerdo entomatado, los huevos rancheros con chorizo y la breakfast pizza. El cafe es increíble y el jugo de zanahoria con limón no te lo puedes perder.

los arancini increibles, los spaghetti all’amatriciani impecables y la pasta al vodka y salmón sin palabras. Este restaurante se lo recomendaría a cualquiera, es una experiencia gastronómica italiana completa.

eramos dos personas, primero ordenamos el omelette de jamón y queso, casi no tenía relleno, las papas que llegaron de acompañamiento estaban frías y el bagel ya no viene con queso crema sino que tienes que pedirlo y pagarlo aparte. De segundo pedimos las challah french toast, muy secas y faltas de sabor. No volvería a ir

muy mala experiencia después de su reapertura. ni los nachos ni el dulce de chocolate son iguales a lo de antes. cambiaron para peor.

Es la segunda vez que vamos. La chica que atiende es muy atenta. La comida y los tragos mus buenos.