Un lugar muy apropiado para ir a cenar tarde, a la salida del teatro. Tomamos una mesa libanesa (plato combinado) para dos, con todo muy correcto. El servicio, amable y eficiente. Y una terraza muy agradable, a la que le sobraba quizás lo alto que estaba el volumen de la música.

Una interpretación razonablemente correcta de la comida asiática, a la que le faltaría algo más de esmero. Las alitas de pollo no tienen nada especial. La salsa de la corvina-ato un tanto cargante, desmerecía la buena calidad del pescado. Algo mejor el sake grill, en el que el acompañamiento estaba más en consonancia con el salmón.

Fuimos con una pareja de amigos que vinieron a visitar Panamá y quedaron encantados. Los baos de pescado blanco, el crunchy de atún, las baby back ribs y el risotto de hongos, sencillamente deliciosos. Y en cuanto al servicio, encantadores. Cuando llegamos la música estaba demasiado alta y no tuvieron problemas en acomodar el volumen al momento que lo hicimos. Pedimos unos gin tonics cuando el restaurante estaba casi vacío y no nos importunaron para que los terminásemos con prisa.... Una delicia

De nuevo un acierto la elección del lugar. Funios con unos amigos que vinieeron a visitarnos desde Europa y quedaron, como nosotros, encantados con la comida, el ambient, el servicio. Un auténtico diez. A destacar la fideuá negra con pulpo.... inmejorable!!

Un lugar absolutamente recomendable. IMpecable en todos los aspectos, con una interpretación de la cocina italiana de lo más acertado: nada de pasta y pizza como se suele encontrar en otros restaurantes que se ponen la misma etiqueta de cocina italiana. De impresión los espagueti con centollo y el risotto a la veneziana. Para repetir sn duda

La entrada del restaurante esd e lo más original, a través de una peluqueria DE VERDAD, que está abierta en horario diurno. El ambiente superagradable. Más propio de parejas románticas, pero aunque fuimos un grupo familiar, resultó igualmente muy acogedor. El servicio, impecable, de una eficacia fuera de duda y derrochando simpatía. Y la comida muy buna: la Gyozas de puerco, el spicy tuna rice, la ensalada de algas... Y de postre, impecable el Brownie tempura...de la materia que están hechos los sueños. Estoy inpaciente por repetir.

El lugar es bien sencillo, con una decoración un tanto excesivamente recargada, pero la comida es de lo mejor que me he encontrado en restaureantes mexicanos fuera de México: aunténtica 100%. Espectacular el queso fundido con hongos y los nachos con chorizo. Y el servicio, tremendamente atento. Todo ello con unos precios nada exagerados. Recomendable para una cena informal.

Tuvimos una excelente cena de graduación. Una mesa para ocho en el patio interior, muy bien atendidos. La comida, bien servida y en su punto. Excepcional la sopa de cebolla y la fideuà, así como el Brwnie de postre. Una excelente elección, absolutamente recomendable

Fui con muy altas expectativas en cuanto a la decoración del local, que me habían dicho que era algo extraordinario, y la verdad es que no es nada del otro mundo. La terraza es bien agradable, aunque harían mejor en bajar un tanto el volumen de la música para poder conversar sin gritar. La comida bien: el ceviche de pescado con rodajas de plátano frito, muy bueno; correctos los tostones de puerco y marisco; y de plato fuerte, el guacho cumplió lo esperado.

El local es apropiado para el tipo de comida americana rápida que sirven en una carta más bien corta, y con algunas repeticiones. Tomamos un plato de carnes surtidas para compartir entre cuatro, con sus correspondientes guarniciones. Aceptable, auqneu nos cambiaron alguno de los ingredientes. Dos cuestiones a mejorar: la ausencia de cervezas nacionales que no fueran artesanales (una Balboa o una panamá se echan de menos) y el volumen excesivo ce la música