Anoche aproximadamente a las 10:15 pm fui a cenar con una amiga; solo una mesa ocupada con dos personas, el aire acondicionado estaba apagado, asumimos que por la hora, así que no le prestamos mucha importancia aunque hacía calor y el ambiente musical estaba apagado. El mesero, nos informó que solo había disponible Emparedados y sancocho, lo entendimos por la hora. La orden salió relativamente rápido y muy bien presentada (Hasta aquí todo bien) sin embargo el sabor de los emparedados no era el usual al de las otras sucursales, aparte pedí picante y me traen una botella de la marca D’Elidas y me pareció muy bien ya que tiene muy buen sabor, pero resulta que el contenido del frasco era otro diferente, era un picante aguado, de una calidad muy inferior y no picaba en lo absoluto, agregó una foto de la botella con la que engañan a la clientela. Eso nos hizo concluir que el sabor de los emparedados era diferente debido a que la calidad de los productos que utilizan para hacerlos cambio pero no para mejor, sino para cambiarle la calidad de la comida. Motivo por el cual la relación costo-calidad es pésima ya que el costo es el mismo y la calidad muy inferior. Eso lo pudimos verificar en la calidad de la mayonesa y Ketchup que colocaron en la mesa para acompañar las papas fritas, ya que eran de una muy baja calidad y no se corresponde con lo acostumbrado y el segmento de precios de este restaurante. Pareciera que están haciendo una reducción de gastos, lo cual está muy mal enfocado ya que está afectando directamente la calidad de la comida. Adicionalmente: Hace unas semanas pedí un emparedado cubano por delivery y me paso exactamente lo mismo con el sabor y calidad del producto que no eran los mismos, pensé que era por ser por delivery, aunque no debería ser. Pero ahora me doy cuenta que fue porque bajaron la calidad de los productos.

En esta oportunidad decidí probar los nuevos rolls en el menú, cómo siempre muy ricos y muy buena presentación, buen ambiente y excelente atención!

Hoy por quinta vez asistí al brunch dominical, el cual había dejado de visitar por la política absurda que tienen en cuanto a la bebida, open mimosa o una copa de champaña, lo cual es absurdo en su totalidad ya que por si no se han percatado la mimosa es a base de champaña. Antes de ir fuimos a dos Brunches donde ambas cosas (champaña y mimosa) son ilimitadas, pero lamentablemente para nosotros estaban llenos al 100%, mientras que cuando llegamos acá la ocupación era igual o inferior al 20% y así se mantuvo durante nuestra estadía. Señores encargados tomen en cuenta las limitaciones que imponen en cuanto a las bebidas, a lo mejor eso les está impidiendo ganar clientela o les está ahuyentado la misma; adicionalmente la calidad de la comida ha disminuido considerablemente.

Las Cachapas a pesar de tener buen sabor no son 100% de maíz, la masa está mezclada con harina, se siente al probarlas y también se nota en el color de la mismas; deberían prestar atención a eso ya que disminuye la calidad de la comida que ofrecen. Adjunto foto del color de las Cachapas compradas el día de hoy dónde por características visuales es fácil determinar que la masa está mezclada con harina.

La experiencia estuvo ok, ya que a pesar que fue muy buena la atención y cuentan con un ambiente agradable, lo primero que no nos gusto fue que no tenían corvina, lo cual es muy raro ya que es una sugerencia del chef y recién abrían para el almuerzo, la entrada estuvo muy rica (antojitos), yo pedí un Udon de Mariscos el cual tenía buen sabor, pero escaso en mariscos, tal vez sea por el ¿Gastro Tour?; considero que no debería ser ya que de ser así habla muy mal y pasado el Gastro tour los clientes no van a querer ir, lo mismo paso con el plato de entraña, la misma era algo pequeña para lo que regularmente sirven en los restaurantes en Panamá (8Oz); creo que no decía el tamaño, pero es una porción chica y delgada, aparte estaba dura, no parecía del todo Entraña sino un corte cercano a la misma.

Experiencia fatal, después de haber pedido un plater de puerco, con arroz y ensalada griega, junto con un yeero de pollo con ensalada griega y después de esperar 5 minutos mientras preparaban mi plater y ya habiendo servido el arroz viene un chico y le dice a la chica que me está a atendiendo que ya ese arroz estaba vendido y que estaban haciendo más y ni siquiera me dieron la opción de esperar por el arroz sino que se limitaron a darme la opción de cambiar por papas fritas. Me parece un abuso y falta de respeto ya que no tengo la culpa de los errores de comunicación de los colaboradores del restaurante sobre que productos tienen o no. Soy cliente, mejor dicho era cliente frecuente, pero a partir de esta mala experiencia sumada a otros detalles que en las visitas anteriores a esta sucursal de costa del este deje pasar por alto no regreso más, que lástima que un establecimiento con personal joven y dinámico cometa ese tipo de equivocaciones. No es la primera vez que salen con algún detalle, pero considero que ya es suficiente y cómo clientes todos merecemos respeto ya que somos quienes mantenemos vivos los establecimientos que visitamos. Reitero fue un abuso y falta de respeto

Muy buena atención, el restaurante estaba bastante lleno y a pesar de eso y que solo atienden dos chicas el servicio fue excelente y la comida muy rica! Buena opción para comer camino al interior

Muy buena atención, buen ambiente y muy rica la comida, sin embargo y a pesar que califique el servicio con 5 estrellas la comida demoro demasiado tiempo, pero cuando digo demasiado es 3 veces el tiempo que normalmente dura en estar lista una pizza en un restaurante Italiano. Por favor traten de corregir ese pequeño pero significativo detalle porque en todo lo demás están muy bien!

Siempre buena opción para comer Sushi, por lo general la atención es buena a excepción que SIEMPRE demoran MUCHO TIEMPO para entregar la factura fiscal. Tendrá algo que ver con evasión de impuestos? Es una pena que pongan tantos problemas para entregar una factura la cual por ley deben darla una vez que se paga la cuenta. Hoy me fui SUMAMENTE DECEPCIONADO de esperar más de 15 minutos la factura fiscal que debieron entregar una vez pagada la cuenta y al final me tuve que ir sin la misma. Entonces si uno denuncia este tipo de situaciones el cliente es malo, me parece que deben trabajar seriamente en mejorar ese aspecto. Por lo general visitó este restaurante en sucursal San Francisco y Cangrejo en promedio dos veces a la semana y siempre es la misma historia de esperar largo tiempo por la factura fiscal.

Buen ambiente, buena atención, todo iba muy bien con el Café y el jugo de naranja, algo en lo que difícilmente se puede fallar, sin embargo pedí Hojaldre a Caballo y me lo dieron frío, ni siquiera tibio, lo regrese y lo calentaron en microondas, lo cual puso pegajosa la hojaldre, considero que para los precios nada accesibles que tienen lo mínimo que tenían que hacer era hacerlo nuevamente, ya que aparte de estar pegajosa la hojaldre el queso feta se derritió. Es apenas una experiencia pero dudo mucho que regrese!