Llegué súper fácil. Vi una foto y vi que era el antiguo restaurante de sushi.
Deberían tener alguien afuera, echándole un ojito a los carros pero nada que no se pueda resolver.
De resto, la atención magnífica, me atendió una chica morenita con trenzas largas, no tenía gafete por lo tanto les debo el nombre, pero que chica tan agradable. Sus recomendaciones SÚPER atinadas.
La comida un poco demorada pero valió cada segundo de la espera. Pedimos el tartár de atún, el salmón y el pulpo, de tomar un trago de Gin. No tienen agua de la pluma?
El ambiente súper tranquilo, tenían como detalles con la música y bocinas que sonaba y se paraba pero muy bonito decorado.
Gracias por preguntar y por tan buen servicio.
10/10