En resumen:
mala experiencia de servicio. Pobre atenciÓn al detalle
dobles cobros de las cosas mÁs comunes (caÑas)
prÁcticas engaÑosas y perezosas por parte del staff que te dejan sin ganas de volver. He sido cliente de la malagueña por años... Las cañas, los serranitos y las papas bravas han sido mi snack after office y sitio de reunión con mi amplio grupo de amigos. Después de haber tratado de reservar una mesa de la malagueña de san francisco y tener que cancelar porque la convocatoria que hice para reunirse y recibir saludo de cumpleaños era algo informal y no tenía la cantidad exacta de personas y que repentinamente me pidieron un depósito de $20 dólares por persona (cosa que no hacían antes) y decidir cancelarlo por esta arbitraria decisión... Ya la cosa estaba empezando algo incomoda. Finalmente convoque en una invitación abierta para la malagueña de calle uruguay. En el transcurso de una par de horas llegaron y se fueron más de 30 personas, en total consumimos más de $350 dolares pero el servicio fué lo que nos rompe el corazón y nos deja deseando no volver a repetir esa mala experiencia. Al llegar y al comentarle a la mesa que mas personas llegarian en el transcurso de la noche la mesera me dice ¨una sola cuenta! ¨ le pregunte porque y me responde que es así como ella trabaja... No deja ninguna otra opción y los pedidos y las cañas a veces llegan y aveces no. Pareciera que se les olvida y cuando se les recuerda de la caña y finalmente la traen y la cobran doble. Los que se fueron antes tratan de dejar pago su pedido, los que nos quedamos hasta el final nos vemos obligados a hacer memoria con factura en mano de lo que consumimos, sin poder confirmar si la cuenta final era correcta o no (finalmente confirme que no se eliminaron todas las bebidas y platos de los que se fueron primero, cobraron doble caÑas y otros articulos) tuve que pasar la última media hora de mi reunión de cumpleaños haciendo cuentas con mis amigos de quien consumido que y cuanto seria, con calculadora y factura en mano hice yo el trabajo de la mesera mientras pasaba persona por persona co. Pena y rabia de tener que hacer esto por lo que estoy pagando. Una experiencia fatal, media hora perdida de compartir por la pereza o las malas prÁcticas de un establecimiento que decepciona con su servicio. En este local en particular casi ni se escucha la mÚsica afuera. En resumen:
mala experiencia de servicio. Pobre atenciÓn al detalle
dobles cobros de las cosas mÁs comunes (caÑas)
prÁcticas engaÑosas y perezosas por parte del staff que te dejan sin ganas de volver.