Llevaba un tiempo queriendo visitar este restaurante y puedo decir que fue una experiencia muy buena a pesar que hubo algunas cosas que no me gustaron en cuanto a servicio, que es un poco lento y otras cosas que mencionaré más abajo.
De entrada pedimos las bolitas de sésamo (para los que no saben son fritas y algo dulces). También pedimos unos rollos de vegetales, muy buenos. Estos ultimos son la entrada perfecta para dos personas que no quieren quedarse llenos antes o durante disfrutan su plato fuerte dependiendo de lo que pidan. A buen precio ambos.
De plato principal pedimos dos tipos de ramen (Karai Tonkotsu y Miso), en mi caso es primera vez que lo pruebo y me pareció muy rico. Cabe recalcar que las porciones son generosas. Ademàs pedimos un plato llamado Takoyaki, no me gustó mucho. No soy muy amante de la comida japonesa, con excepción de algunos platos.
De bebidas pedimos Bubble tea de Melón y de Taro (oficialmente adicta a este) me fascinó. Lo malo es que no tenían tapioca para echarles, esto me parece inaudito. Un Bubble tea sin tapioca deja de serlo...
En cuanto a servicio realmente lento nos atendieron alrededor de 3 meseros, la atención de uno de ellos no me gustó.
En resumen fue una muy buena experiencia sin contar el lento servicio y que se les había acabado la tapioca para los Bubble tea. Regresaría por el Ramen y a probar los bento box.
