Miranda Bakery & Cafe

lugar muy bonito, y la comida muy bien preparada, hecha con muy buenos ingredientes … delicias!!! ya el servicio, una lástima! Mala cara, cero amabilidad y se olvidan de los pedidos…

Solo he probado las galletas y los cupcakes y debo decir que estaban de sueño... divinos. El servicio es acertado, adecuado para un restaurante de este estilo. Debo felicitar a su dueña porque su concepto y la delicadeza con la que prepara sus galletas y dulces es admirable. He escuchado de sus hamburguesas, las tengo en el pendiente..!! Creo que el local se quedó pequeño..!!

El lugar siempre está lleno y lo más probable es que tengas que esperar para que te asignen una mesa, esto es por que la comida y los postres valen la espera! Pedimos una sopa de papa con cerveza y bacon, la crema espesa y con buen toque de picante. De postres un lava cake de chocolate con helado, que a mi gusto es más delicioso que el original; para probar algo diferente, pedimos el cheesecake de peanut butter, literal sabe a mantequilla de maní, estuvo riquísimo y muy cremoso.

He estado en Miranda mínimo 8 veces, la calidad de su comida es indudablemente deliciosa, la atención varía pero es buena, pero me lleve una decepción la vez pasada ya que a pesar de ser yo la que cometió el error de pedir un plato que solo está en el menú los domingos, me dieron una opción similar pero en hamburguesa, vale, todo bien hasta aquí, la chica que nos atendió, tuvo que acercarse a la mesa mínimo 4 veces, primero no había carne, luego que me ponían pollo desmenuzado, luego que salía frito, o sea creo que si no tuviera la certeza de que la comida es buena me hubiera ido a la segunda visita, para mi comer fuera significa pasarlo bien, en un lugar de comida deliciosa, no quiero que me den excusas de cosas que no hay en el menú. Creo que deben tomar eso en cuenta antes de que uno siquiera vea el menú, de modo que ya uno esté anuente de que hay que no ese día. Solo como recomendación. Volveré por supuesto porque la calidad de la comida es indiscutible.

Extremadamente delicioso, el lugar super acogedor y cómodo, te hace sentir como en casa. Los dulces ni hablar, provoca probarlos todos