Michael's (Obarrio)

wow! Loved this place. We went for breakfast. It wad hard to choose. Food and food presentation fabulous! We had a large group. Everyone ordered something different. It was all good and looked magnificent. I ordered the strawberry n cream waffles! Delish! Ricotta cream. I would return and bring others. Owner is great too!

Siempre es un gusto ir a este sitio, hoy fui almorzar y como siempre todo excelente, comida, cafe postre, atencion y ambiente magico, lastima es el horario.

Hoy que es Martes! aprovechamos la promo en todos sus platos (te quedan en $10 c/u). Pedí el steak & eggs delicioso, la carne suave , huevos revueltos con papas salteadas. Adicional también pedimos los patacones con topping de pollo desmenuzado. Muy rico! de tomar iced caramel coffee y jugo verde. Volveremos 🙌🏻🍳☕️

El restaurante tiene dos ambientes, al aire libre y el local cerrado con aire, sin embargo el ruido de la licuidaro y otros aparatos de la cocina retumban en tus oídos, por otro lado las mesas están super pegadas unas a las otras. Pedimos café con leche 4.00, un cappuccino 4.50 y un ponche de frutas 4.50; fueron las tazas más pequeñas en las q me han servido jamás. Probamos la tabla brunch "sabor de Michel" (14.00), q traía un omelet de queso, un pancake, media tostada francesa, unas tiras de bacon y unas papitas bravas con tres mini porciones de piña, sandia y melón; también un burrito de pollo q trae papitas bravas también (12.00) y finalmente un Omelette Western, con mozzarella, champignones y chorizo, con papitas bravas. Tenía otras expectativas...

Buena ubicación, buen estacionamiento con cuidador/parquero. La calidad de la comida era fresca y bien presentada. El ambiente un poco ruidoso para mi gusto lo que afecta la conversación en la mesa; esto se arregla con retoques en el diseño, nada grave. Tuvimos un pequeño inconveniente con dos platos, cosa que se puede evitar en el futuro con entrenamiento a la gerente y capitán de saloneros. Ellos dañaron el buen esfuerzo de todo el equipo del restaurante. Por mi parte, la peor primera impresión y ya no volveré. Coetarios jubilados: piensenlo!