Masala

Buen lugar para compartir entre amigos y familia. Recomendado el butter chicken . El local no cuenta con estacionamientos es el único inconveniente.

Es un lugar pequeño, acogedor, con un excelente servicio al cliente; me encantó el ambiente doble de poder sentarte ya sea en una silla o en los cómodos almohadones a degustar esta comida inmemorable. Pedí un pollo al curry y sabe completamente diferentes a lo que uno estila comer; el arroz bastami con azafrán estaba increíble. Otro plato con pollo con tomates y especias muy muy rico. Para las personas que le gusta algo diferente este es el lugar.

Lo mejor de la comida Hindú. Altamente recomendado. Desde la atención personalizada de la dueña y el salonero muy atento hará que te traslades a la India sumándole el ambiente, el olor, las alfombras. Nos acomodamos en las mesas del piso. Otro nivel de ambientación. La comida hace honor a tanta atención y lujo, empezando por la samosas, pedimos de pollo, vegetales y cordero cada una llenó las expectativas. La picada mixta estuvo de otro mundo la acompañamos con arroz de nueces, pedimos también cordero sazonado con especias y puré de tomate acompañado de arroz con azafrán. Todo acompañado de naan casero. El final no podía ser mejor el helado hindú te haría regresar aunque no quieras. Volveremos hasta probar todo el menú.

al entrar es un restaurante muy calido un ambiente callado y tenuemente iluminado nos atendieron de inmediato y nos ayudaron a pedir la comida estuvo estupenda lo picante no es tan picante mas como muy sazonado auténtico a la comida indostana yo pedi el nivel 3 y creo que pude haber pedido nivel 4-5 sin problema eso si a mi me encanta el picante asi para gustos los colores , en total me parecio un restaurante increíble

La propietaria nos guió en pedir los platos que sin ser expertos de la comida india nos podrían gustar. Acertó: un pan muy bueno, unas espinacas (u hojas de mostaza) con queso que constituían un plato sabrosísimo. Lo recomiendo. Volveré.