¡Que lugar mas lindo! No solo la decoración, sino los postres. Solo entré intrigada por lo lindo del lugar a ver si era tan rico como lindo. ¡Pues si!! He probado el mejor profiterole de mi vida. Pedí el de fresa y estaba…exquisito. No muy dulce, no muy duro. Perfecto. No me molesté en pedir descuento de jubilado ya que la ley explica que es para comidas completas (comida, bebida no alcohólica y postre). Háganse un favor y regálense un postre de este lugar. No se van a arrepentir. Eso si, mentalizados que no es barato (un budín diplomático, o sea, una mamallena sofisticada cuesta $4.00). Felicitaciones a sus dueños. Definitivamente regresaré para probar otros manjares.
Platos recomendados
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Precio por persona de: Entrada + Plato principal + bebida SIN ALCOHOL
Precio = Entrada + PLato principal + Bebida
Me encanto este lugar, el pie de limón acompañado de un cappucino 10/10. El lugar pequeño pero super acogedor, muy bonita la decoración. La atención excelente.
Pedimos Pavlova, mil hojas, tarta de chocolate y pecan pie, todo estaba riquísimo. La atención de la dueña fue buena y nos explicó cada postre. El lugar es pequeño pero bien decorado. Casi no voy por los comentarios del descuento de jubilado, ya que pensé que estaban faltando a la ley, pero luego averigüé que las refresquerías/cafeterías no están obligadas a dar descuento de jubilado, a menos que sean franquicia. Así que si van con una persona jubilada, ya saben.
Mal servicio. La dueña es grosera con sus clientes, y mienten. No dan descuento de jubilado. Sepa que el descuento de jubilado es un derecho, y por ley debe darlo. Fui porque mis tías han ido y querían que conociera. Pero se habían quejado de que cuando preguntan por el descuento la dueña les dá un discurso de porqué no lo da. Compramos un dulce para llevar. Antes de comprarlo pregunté si el pedazo que tenían en el mostrador era el que me iban a dar (para saber el tamaño de lo que estoy pagando), a lo que la joven me contestó que sí. Me entregaron una cajeta que me pareció más pequeña que el pedazo que dijeron que me darían. Al abrir la cajeta ví que era más pequeño del que había visto. Cuando fui a reclamar la dueña quiso instruirme en cómo ellos calculan las porciones, pero ese no era el punto. El punto es que me mintieron diciendo que me venderían un tamaño X, sin embargo me entregaron un trozo más pequeño. Le dije que no necesitaba su explicación, lo correcto era entregarme lo que prometieron. Como no ví intención de dar buen servicio al cliente, le advertí que no regresaría, a lo que la dueña contestó "ah bueno, no regrese". Creo que le falta un curso de cómo manejar un negocio, eso incluye saber apreciar a sus clientes. Si $5 de un cliente no le hacen falta, entonces creo que $5 de 100 clientes recomendados tampoco.
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