El restaurante en general es bueno. Oportunidades de mejora: Musica, al parecer habían olvidado encender la música, pero luego de aproximadamente 45 minutos, la pusieron. Servicio mas ágil, la comida tomo mucho tiempo en llegar a la mesa. Sobre las entradas, pedí unos camarones con aguacate, sobre un plátano, pero lo sentí muy bajo de sal, le faltó más sabor. Los platos fuertes estuvieron buenos, fetuchine con langosta (algo picante), pasta al bongole y salmón al grill. El servicio muy bueno, para resaltar.
Agradecemos su visita y lamentamos el percance con la música, normalmente mantenemos muy ambientado el restaurante, incluso tenemos música en vivo toda la semana. Nuestros platos demoran talvez un poco pero preferimos sea así antes de comprometer la salud y el bienestar de los comensales, cada platillo servido a la mesa se elabora al momento dado que manipulamos productos del mar aunque no 45 minutos. Las canoas de plátanos rellenas de avocado y camarón son de las entradas más vendidas nos sorprende saber que no cumplió sus expectativas, estaremos pendiente ante sus observaciones pues todas las criticas constructivas las recibimos con los brazos abiertos.