Primera vez que lo visito a pesar de pasar siempre por ahí, y debo decir que no me defraudó. Todos pedimos pasta pero todos quedamos satisfechos con lo que ordenamos. Un menú bastante amplio, las pastas son de buena porción y muy muy ricas. El servicio fue bastante atento y tienen para sentarse adentro como una terraza, el restaurante es enorme. Volvería.
Platos recomendados
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Precio por persona de: Entrada + Plato principal + bebida SIN ALCOHOL
Precio = Entrada + PLato principal + Bebida
La atención es rápida y eficiente. La comida estuvo bien, nada espectacular, la porción de algunos platillos son un tanto reducidas. Pedimos berenjena con tzatziki, ensalada griega "deconstructed" porque son los componentes de una ensalada griega sin hacer, pulpo al carbón, pollo a la griega y corvina todos buenos pero no sobresalientes, mientras que el dulce de moca es una delicia.
Para cenar y compartir pedimos pulpo al carbón con un toque de limón, y pan pita que estuvo muy bueno. De plato fuerte, fue mar y tierra que trae filete de res, langosgtinos y almejas con una salsa al ajillo fenomenal. Para acompañar jugo de limón con hierbabuena y jugo de fresa. Excelente atención.
Este restaurante es familiar, la comida la preparan con ingredientes frescos, me gusta el punto de cocción de sus mariscos, aunque las porciones están extremadamente "gourmet", muy pequeñas. Pedí el pulpo a la parrilla con ensalada verde, y realmente la porción era de una copa de ceviche, también ordenamos la parrilla da Mar y Tierra, y cual fue la desilusión con el tamaño, dos medallones de filete mínimos, un platito de almejitas pequeñito y tres, si tres langostinos. La atención buena. El ambiente rústico.
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