Atope

súper bien ubicado, la comida sin duda de las mejores, la atención del personal sobrepasa las expectativas, sin embargo el ambiente le hace falta vida. con una barra enorme sin sillas que está vacía sin actividad alguna.- la música normal .-

No es solo la calidad de la comida lo que hace brillar a este lugar, sino también su ambiente excepcionalmente acogedor. Con una decoración que evoca la calidez y una atmósfera vibrante, este restaurante crea el escenario perfecto para disfrutar de una experiencia gastronómica única

esta es la 3ra vez que voy a este restaurante y la verdad que me sigue gustando mucho pero siempre recuerdo que hay que pedir varios platos porque son muy pequeños. todo muy rico eso si! las croquetas de jamón serrano volaron! las favoritas de mis hijos… las berenjenas con miso no las había probado y me encantaron, infaltable el arroz negro con camarones. probé el fideuá Thai y me encanto, tiene el balance perfecto entre picante y dulce, excelente! la carta de postres no me entusiasmó, así que no la probé… muy rico el Atope punch!

Fuimos el pasado sábado en la noche con una familia de amigos, éramos 4 adultos y 5 niños, llame para reservar desde el miércoles y me dijeron que solo había puesto en el jardín, pero que si llovía nos movían al VIP. esto no pasó, cuando llegamos a las 7 nos dijeron que habían reservado el VIP y que nos “arreglaban” bajo el techo al lado de la entrada. las sillas y la mesa (alta) incomodisima. la comida rica, un poco pesada pero como son raciones pequeñas, vale la pena probar un poco de todo. mis recomendaciones: croquetas, arroz de solomillo, Fidegua, salpicón de pargo (pequeño). los postres no probamos porque no se veían muy apetitosos.

Atope tiene un ambiente muy agradable , especialmente en la terraza . la sommelier es excelente, lo ideal es irse por su recomendación , nunca falla. la comida tiene una buena variedad de platos, algunos son deliciosos y otros podrían mejorar. el arroz meloso es riquísimo , el plan de masa madre también. Creo que vale la pena visitarlo y formarse la propia opinión.