La corvina era tiburón. Fallo 1 La ensalada con aderezo estaba bien hasta que decidieron ponerme aderezo como si fuera sopa. Fallo 2 El aire a toda potencia no deja comer y enfría los alimentos antes de degustarlo. Fallo 3 Pueden mejorar, pues la verdad tienen buena oferta, solo volveré si tengo que ir a la DGI y tengo mucha mucha muchísima hambre

En decadencia la calidad de su oferta gastronómica. Su buena atención y cordialidad puede sacar la cara con ellos pero deben mejorar los productos que salen del corazón del restaurante. Mi entraña con langostinos frías con muy bajo nivel de sal se repitió en un plato igual de otro comensal en la mesa. Un filete apanado de pechuga de pollo con baja temperatura también nos desilusiono. Les doy dos estrellas entonces por quemar las entrañas cuando solo debían calenarlaa

Muy agradable cada entrada y plato sugerido por los colaboradores del restaurante. El arroz a la chiclayana simplemente fenomenal. Los platos de entrada como conchuelas son muy deliciosos, generosos y de sabor único. Recomendado para cualquier momento del día.

A eso de las 11:45 a.m. nos acercamos a su local ubicado en Obarrio. En cuanto ingresamos nos dijeron que aún no habían abierto y que estaban por limpia. Les pregunté si podíamos esperar dentro mientras limpiaban, aceptando con un tímido "sí". Debí imaginar que el interés por servir era paralelo al producto final; la comida "tímidamente mexicana". Pedí de entrada una sopa de tortilla; me pregunto dónde habrá quedado el pollo; y las TORTILLAS, pues estaban "MISSING IN ACTION". Pedí de plato fuerte un alambre de pastor; al final recibí un alambre de bistec picado; es más, parecía un bistec picado encebollado. Tienen 3 niveles de picante, pero solo uno pica y de manera extrema, los otros dos no tienen gracia. Les recomiendo revaluar el menú, que además de limitado, tiene precios prohibitivos. Recomendaría incluir elotes, que son sencillos de producir, para dar un aire "mexicano" al menú. Y por cierto, no escatimen con el pico de gallo y los limones, que pareciera que fueran inexistentes.

Lo cierto es que fui por recomendación y no pensaba entrar. Debo decir que el ceviche mixto estaba bastante aceptable pero mi orden de corvina apanada no fue de mi agrado. La chicha morada con azúcar hasta el tuétano y que decir del servicio. Una sola persona atendiendo a todo el local con 5 mesas de 2 comensales cada uno. No lo recomiendo.

Cadena americana predecible pero no por eso agradable para experimentar aunque sea por una ocasión. Lo cierto es que quien nos atendió equivocó mi orden a pesar de haberle recalcado lo importante de no confundir los platos, cosa que hizo al revisar la orden 2 veces. Las cantidades son muy generosas y considero que puedes compartir 3 platos entre 4 personas sin problema alguno. El disponer de una tetera de café en la mesa me parece una idea simple pero muy oportuna. Quizá vuelva pero solo para comer un Panckake o dos.

Me parece una oferta gastronómica de muy buena calidad y servicio. De los platos que ofrecen recomiendo el pulpo Ahumado Casa Urrutia y el arroz negro en paella. La atención y el ambiente permiten disfrutar del momento y la deliciosa comida

Me gustó cada uno de sus platos, el ceviche de camarón caliente es increíble; el arroz chaufa al estilo oriental delicioso y la corvina especial que tienen en el menú sin igual. Lo recomiendo totalmente. El pan que te entregan y las salsas hechas en casa son un detalle muy adecuado.

Le doy 1 estrella al servicio de la sucursal de obarrio porque cada vez que vengo nos cargan alzados y preguntándonos más veces de las necesarias si necesitamos ayuda cuando no la precisamos. De verdad, necesitan dejar que el cliente observe la oferta antes de perseguir a punto de molestar.

Recuerdan cuando acompañaba sus sopas y cremas croutones? Considero que ha ido en picada la oferta gastronómica de este restaurante; lo puedo comparar con una cadena de comida rápida con fachada de productos saludables. El eslogan de Tomato podría ser; "siéntate, pide, traga, paga, y adiós" No lo recomiendo, ni aunque agreguen nuevamente los croutones en sus sopas y cremas.