visitamos por primera vez sus nuevas instalaciones, y nos pareció igual de acogedor que en el local anterior. Conservaron su área abierta (terraza hacia la calle) y su espacio cerrado más amplio y con mayor entrada de luz. Tengo que resaltar que el personal, a pesar de estar en una apertura, preparado para orientar tanto en las opciones de la carta como en detalles de la decoración y la historia detrás de la intención de cambio de local. Les recomiendo la pizza sweet and spicy (la mezcla perfecta de sabores) y unos calamares rebozados con un punto de picante que te engancha a querer más. Agradecidos con Leiber por describirnos perfectamente el menú y atinar con nuestro paladar. Recomendado para visita familiar, en pareja, amigos, trabajo. A pesar de estar en zona transcurrida cuentan con excelente facilidad de estacionamientos.

Primera visita al restaurante y desde la entrada hasta la toma del pedido la atención fue excelente. Fuimos por la promoción de 2x1 en pizzas y la de pepperoni y combinación que pedimos estuvieron deliciosas. La próxima visita iremos por la de chorizo y cebolla, ya que el chorizo es una receta de casa y estuvo AON. Un ambiente tranquilo para disfrutar en familia, amigos y solo y cuentan con terraza por si quieren un espacio más calentito.

Un lugar acogedor, ideal para una comida entre amigas o reunión familiar. La carta no es tan amplia, pero lo suficientemente variada para complacer a los diferentes paladares. Ofrecen un menú lunch para los días de semana con excelente precio y con platos de su carta. La presentación de la comida, tamaño de las porciones y relación precio excelente. El servicio fue un poco lento (considerando que solo estaba una mesa ocupada), las bebidas demoraron en llegar, igual que el postre. Ordenamos un pastel de yuca con ropa vieja servido con una ensalada verde y una hamburguesa de pollo con papas fritas, ambos platos súper ricos y vale la pena probar el pastel de yuca, muy bien cuidado su sabor y presentación. Para el postre pedimos un flan escondido, exageradamente coronado en crema chantilly, exceso de bizcocho muy arenoso y seco y poco flan y también seco …. lo dejamos casi completo porque era imposible disfrutarlo.

Es una buena opción para la familia y amigos. Mantienen la calidad y estándar en su oferta y la atención siempre es muy buena. Mis platos favoritos es el chicken parmigiana y chicken margheritta. Para niños tienen unos combos súper completos y con buenas porciones.

Un ambiente súper colorido y ambientado con música house. Dos ambientes (cerrado y terraza), en esta ocasión ordenamos unos patacones con ropa vieja que son una delicia, unos nachos maya mixtos que estuvieron ricos y son ideales para compartir por lo menos entre 3 personas. La atención fue excelente desde que llegamos, calidad de comida, tiempo de entrega y todo el tiempo atentos a cualquier solicitud. Nos encantó la atención de Arnaldo.

Ofrece diferentes ambientes todos muy acogedores y espaciosos. La atención del personal a otro nivel, siempre atentos y pendientes a nuestras solicitudes. Como fue un encuentro de media tarde compartimos un fundido de quesos con focaccia con mantequilla de ajo, un cóctel y un capuchino. El establecimiento cuenta con estacionamientos limitados para la cantidad de clientes que puede recibir. Al llegar estacionamos nuestros carros y estaba un señor que a la puerta de nuestros carros solicitó las llaves, la sorpresa fue a la salida que al solicitar mi llave me pidieron el pago de $4.00 por haber estado 1 hora y 20 minutos estacionada. Solicité factura fiscal sobre ese cargo y me dijeron que no tenían y que era un servicio separado del restaurante. Después de haber tenido que manifestar mi descontento y hablar con personal del restaurante me hicieron la devolución. Es un cargo muy alto y estoy segura que muchos se han llevado mi sorpresa sin quejarse porque no queda de otra, pero cualquiera que llegue al restaurante deduce que los pocos parkings pertenecen al restaurante y no imaginas que hay dos servicios en un mismo local. Recomiendo a Chevere anuncie a través de sus páginas y a la llegada de los clientes. Igual actualizar en Degusta la facilidad de estacionamiento con cargo.

Ambiente súper rico para reunirse con amigos, familiares o en pareja. Cuentan con terraza y espacio cerrado (linda decoración), personal amable y atención rápida, a pesar de que estaba lleno ... algo complicado el parking si la plaza está llena. Para mi hijo pedimos unos nuggets de pollo y estaban buenísimos son hechos de pechuga de pollo y hechos en casa, no pedimos platos fuertes sino entradas para compartir y de todas nos quedamos con las carimañolas (tuvimos que pedir dos órdenes) .... fue una cena súper arada le y de seguro que volvemos.

Lugar tranquilo con excelente iluminación y variedad de oferta gastronómica. En esta ocasión pedimos unos raviolis de zapallo que complacieron mis expectativas desde el tamaño de la porción hasta el sabor. La atención fue bastante rápida, la presentación de los platos bien cuidada y las porciones en general súper buenas en relación con su precio. El menú que aparece en la página de Degusta no coincide con los precios de la carta mostrada en el restaurante.

Tenía excelente ambiente, al punto que nos tocó en terraza. La comida y atención súper disfrutable, como el restaurante estaba bastante lleno la servida demoró un poco. De entrada compartimos unas gyosas, de plato fuerte compartimos un pad Thai con un sabor suave, fresco pero sin perder su toque spicy. Para mi hijo una orden de papas con una orden de tiras de pechuga de pollo (las papas crujientes y el pollo pura carne) Nos gusta mucho el lugar y siempre nos atienden muy bien.

no lo hemos podido visitar durante la cuarentena, pero aún por delivery y para servicio de retiro en restaurante siguen destacándose por su cordial servicio. En esta ocasión nos atendió Erika y fue muy amable, además nos entregó el pedido en perfecto orden cumpliendo con todos los detalles solicitados. Psra comer pedimos el súper famoso ladopsomo pero con pernil y unas pizzas de pepperoni