Lugar casual con buena parrilla y buen servicio. Las costillas son el plato ganador en ésta visita, sin embargo no se quedan atrás brisket con una potente salsa que exponencia el sabor ahumado. El local es sencillo, buen aire acondicionado, pero la música a un volumen exageradamente alto, que te invita a terminar rápido de comer y salir huyendo de allí.

La calidad de siempre en la comida y en el servicio; en cuanto al ambiente han mejorado el sistema de extracción de olores.

Muy buena variedad en las entradas y platos fuertes. De las entradas, destacan el tartar de atún y el baklava de pollo; y en el plato fuerte el chateaubriand bearnaise. Ambiente un poco frío lo q contribuye a que la comida se enfríe rápidamente.

Aquí encontrarán los mejores cortes de carne, con una preparación y presentación impecable. Recomendación de las Tortillas David como entrada así como el Tartar sobre una cama de aguacate; para el cierre Ribeye como plato fuerte.

Esmerado servicio, buena sazón en los platos que probé (hojaldra a caballo y cédula 7). Para ser pet friendly, no tienen control y se les sale de las manos exigir a los propietarios de los perros mal educados, q controlen a los mismos (ladrándole a otros perros y haciendo sus necesidades al lado de las mesas). Esto hace que una buena experiencia gastronómica se convierta en una carrera para terminar de comer y abandonar el lugar.

Recomendable, buena comida en porciones pequeñas (tapas) con excelente ambiente y servicio. Siempre esta lleno, es clave reservar con anticipación.

Excelente experiencia gastronómica y buen servicio. Full recomendado. Con una mejora en el ambiente del local, la experiencia sera muy superior.