Fui a cenar con mi familia, la plaza donde está ubicado tiene buena disponibilidad de parking. La atención es muy buena y bastante rápida. La comida estuvo excelente. Habían platos variados en la mesa y todos coincidimos en que nos gustó mucho la comida. Es un restaurante que se presta para asistir en familia, con amigos o comida con tu pareja.

Fui a desayunar con una amiga, el lugar cuenta con una moderna y bonita decoración, tiene varioa espacios disponibles para estacionamiento y una terraza en caso que quieras ir con tu mascota. Mi amiga ordenó los huevos rancheros, yo ordené la tabla sabor Michaels. Todo estuvo muy rico, pero debo hacer un énfasis especial en la tostada francesa.... estaba "ESPECTACULAR". Hasta donde recuerdo, podría decir que es la mejor French toast que he probado. El personal es super amable, y de hecho el dueño se acerca a las mesas también para complementar la atención y darle un ambiente más friendly. El ambiente es perfecto para ir con la familia o con amigos y pasar un buen rato de actualizaciones.

Es una cafetería bastante cómoda y tranquila como para ir a trabajar o para reuniones informales. Cuentan con un menú bien variado en el que podemos encontrar desde comida de desayuno hasta lunch y cena. En esta ocasión, tenía ganas de comer algo dulce y opté por el frapuccino con café de cookies and cream, y mi amiga por un slice de cake de chocolate el cuam probé y estaba muy bueno. Al principio creí que solo tenían disponibles los estacionamientos frontales, pero al costado del edificio hay un camino que conduce a los estacionamientos traseros. Este será uno de mis nuevos coffee spots.

Es un bar/restaurante pequeño, pero con muy buen ambiente. La atención es muy buena. En esta ocasión fui con unas amigas. Ordenamos tequeños como entrada (la salsita de ajo le dio el toque especial) la Mansa burger (me encantó), la Hanbaga (estaba buena, pero me gustó más la Mansa) acompañadas de papas fritas y deditos de pollo con papitas. El parking puede ser un detalle, pero se puede conseguir estacionamiento cerca.

Fui con mi familia a probar este restaurante con la promoción 2x1 en pizzas. Hay pocos estacionamientos disponibles en la plaza, pero fuimos de noche y conseguimos. El ambiente es muy familiar y acogedor. Le preguntaron a mi sobrino si quería hacer las pizzas, a lo cual accedió. Se lavó las manos y le dieron una mascarilla, y colocó los toppings en las pizzas de acuerdo a las indicaciones dadas. Ordenamos la pizza Aqueronte (fue mi favorita) y Desireé. Los ingredientes se sintieron frescos, las pizzas se cocinan en horno de leña, masa delgada con bordes tostados. Ya nos habían indicado que la masa de estas pizzas estaban elaboradas de forma que no íbamos a sentir pesadez y en efecto, fue así. Definitivamente volveré, si no es por la Aqueronte, será para probar otra/s.

El restaurante es pequeño, aprox 5-6 mesas en su interior con aire acondicionado y una mini terraza con 2 mesas, pero muy limpio y ordenado. La variedad del menú es amplia, hay para todos los gustos: ensaladas, pastas y pizzas. De estas últimas hay opciones gourmet, keto, bajas en carbohidratos, libre de gluten (masa de maíz) y vegetariana. El menú incluye bebidas alcohólicas como cervezas, tragos y cocktails. En mi caso, fui con mi familia y ordenamos la pizza de jamón con champiñones y la pizza 4 quesos. Nos encantaron, la masa es bien delgada, los ingredientes utilizados se sienten frescos, tiempo de horneado suficiente como para que los bordes se tostaran un poco. La atención desde que llegamos fue buena. El único tema es que ambas pizzas no salieron al mismo tiempo, nos trajeron una primero, que por suerte ambas las íbamos a compartir entre todos y la otra llegó pocos minutos después. Lo ideal hubiera sido que llegara la orden completa al mismo tiempo. Definitivamente regresaría. Vale la pena, recomendados.

Me llamó la atención este restaurante por su ubicación y disponibilidad de estacionamientos, en especial ese área porque casi nadie tiene. Mi primera impresión fue que había demasiada luz (quizás se notaba más porque era luz blanca en lugar de cálida, que valga la redundancia, le podría brindar más calidez al ambiente) y la chica que nos atendió fue muy amable y nos dieron de cortesía un mini platito con aceitunas verdes (habían 2 opciones y elegimos aceitunas). En cuanto la oferta gastronómica, mientras nos decidíamos sobre qué ordenar de comer, pedimos margaritas en las rocas, que a mi gusto le faltó algo más de jugo deimón y tequila. Ordenamos chistorras y se había agotado, luego pedimos deditos de queso mozzarella y tampoco habían y ya empezábamos a desanimarnos. Finalmente ordenamos chorizos al infierno (estaban bien), croquetas de jamón ibérico (estaban buenas), y tortilla española (la verdad, no me gustó; la papa se veía algo oscura-no dorada, no quemada y la tortilla misma en general, no se si me equivoco, pero me dio la impresión que se había preparado con aceite re-utilizado. No tenía muy buen aspecto comparando con las que he comido en otros restaurantes).

Mi amiga estaba antojada del guacamole, ya que ella es fan y más del que preparan en Agave Azul. También pedimos margaritas que siempre serán ganadoras acá (riquísimas: buen punto de limón y de licor). Todo excelente, el servicio, la comida y las margaritas. Mi único "pero" con el restaurante es que cerraban a las 10pm, sólo pudimos pedir 1 margarita cada una y de haber cerrado más tarde, lo más probable es que hubiéramos podido ordenar la segunda por lo menos jje. (Tuvieron que decirnos que ya cerraban y habían al menos 2 mesas más como con 5 personas cada una que también tenían que irse).

Fridays siempre será Fridays. Excelete spot para compartir con amigos o con la familia. En esta ocasión fui con una amiga y su pequeña de 4 años. Del menú de niños se pidieron los clásicos chicken fingers con papas fritas y los adultos pedimos la orden de chicken fingers y la Fridays Whiskey glaze burger (luce super grande, pero opté por sacarle los onion rings y comerlos por separado, así me fue más fácil manejarla). Luego de postre para ma niña fue helado de vainilla con sirope de chocolate encima, y para los adultos: brownie con helado de vainilla y el Caramel Wafer Mousse. Todo estuvo muy rico, la atención muy buena, pero si hay algo que noté: las papas fritas. Al parecer las cambiaron, porque las clásicas papitas fritas de fridays llevaban una sazón como con pimienta, eran crunchies. Pero hoy noté que eran más rústicas, y ya no llevan el seasoning tradicional que conocí toda la vida de Fridays (tenía meses que no venía, no se cuándo se dio el cambio, pero ojalá regresen a las papitas fritas originales).

Tenía ganas de comer sushi y se nos ocurrió ir a Sushark. Mi amigo ya había ido varias veces, esta era mi primera visita. Estaba bien indecisa, ya que quería probar al menos 5 diferentes jajaj. Mi amigo quiso probar Parmesano rolls y yo opté por Tiger Wood rolls. El Tiger Woods me encantó, tenía alga crocante alrededor que lo hacía más rico. La atención fue muy buena, la chica estaba clarita del menú y daba recomendaciones al consultarle.