Primera experiencia en Petit ParIs Marbella, ambiente cargado de asiduos comensales, la atenciòn buena y servicial, la entrada en general para celebraciòn de cumpleaños un Bisque de fruto de mar exquisito y ademàs un carpaccio de salmòn, nada que pedir al fruto del mar, nuestro plato fuerte Corvina en drobo con Champignon y aroma de trufa para deleitarse, solo un poco pasado de sal marina, finalmente una copa de vino malbec, en mi opiniòn pasò la prueba, a mejorar el espacio bastante reducido para departir.

Como siempre, excelente atenciòn, entrada de mariscos en salsa, plato fuerte rissotto 7 mares, compuesto por Langosta, Langostino y calamar en anillos, muy buen sabor pero un poco limitada la raciòn, de acompañamiento un buen vino rosado. Valio la pena, sòlo una pequeña sugerencia, deberan acondicionar el local, porque vale lo que ofrece.

Por segunda ocasión tenemos la oportunidad de degustar menú, como entrada nos inclinamos por el antipasto, con variedad de vegetales encurtido, de muy buen gusto y punto de sabor. Nuestro plato fuerte pasta al oleo fruto del mar, la verdad exquisito con aderezo de queso parmesano. Nuestra partida la efectuamos con postre de pastel de limón, presentado en copa de altura. Sorpresa final un digestivo amareto cortesía de la casa, muy buen detalle. Con ganas de regresar.

Producto de nuestra tenida del día del padre y en esta ocasión acompañado de mi hijo menor que estrenaba el mismo adjetivo, me provocó degustar algo de marisco, con tan buena elección del Pulpo al Grill, excelente elección, con una muy buena textura y suavidad, algo acaramelada, con exquisito sabor, acompañado con papas salteadas. Nada mas que agregar.

La tenida familiar para degustar nuevos platos nos llevó al Il Grillo, con buen ambiente para departir y conversar, en cuanto a los platos servidos solicitamos unas almeja con sabor aceptable, que deben superar a futuro, tomando en cuenta que es parte de la especialidad del país, de plato fuerte quería repetir el asopado, degustado en otro sitio, bastante decepcionante por su consistencia y contenido de mariscos, espero sepan superarlo en próxima ocasión. La bebida de melón muy buena, la recomendamos.

Por lo general no soy muy adepto a comer en restaurantes de hoteles, la experiencia no ha sido buena, sin embargo dado que nos invitaron, no habìa opciòn, pero como siempre hay sorpresa. què toque de entrada de chorizo tableño con plàtano maduro, delicioso, una mezcla de las tablas y colòn, recuerdo de niño, cocina tradicional con toque de autor. De plato fuerte filete de corvina casi crispy, acompañado de purè de ñame, volviendo a mi infancia, indescriptible el sabor y combinaciòn lograda, la bebida escogida flor de jamaica, mejor conocida como saril buenìsima. Como siempre hay insatisfacciòn, nos que damos con las ganas de seguir degustando por lo limitado de las porciones.

Luego de muchas menciones radiales nos decidimos a tomar el reto, definitivamente no fue equivocado, se inicia con unas excelentes entradas de pulpo muy tiernos y verdaderamente saborisados, luego unas almejas para todos, con buen toque español. Me tocó escoger el rabo de toro a falta de cochinillo que se había agotado, no me quejo de la elección, muy bien condimentada e hirviente, con acompañamieto del puro arroz criollo, me acuerda el plato en algo al chilindron caribeño con otra sazón e ingrediente, no se puede pedir más. Finalmente cierre de la tipica crema catalana, bocado dulce como la noche que pasamos. Detalle especial del grupo que nos atendió que incluyó al propietario y al capitán, quienes cantaron el feliz cumpleaños a la cumpleañera, incluído pequeño pastel y vino espumante, por cuenta de la casa, tremendo detalle, agradecemos infinitamente este gesto.

Luego de una larga ausencia volvimos a degustar platos ya conocidos como la entrada de pulpo a la gallega bien tiernos de buen sabor, de plato fuerte mar y tierra como siempre bien apetitoso y muy buena condimentaciòn, terminamos con el flan de la casa para terminar la cena. no hay queja por la muy buena atenciòn.

La entrada de pan de solomillo buenìsimo, con el caramelizado agradable y croqueta de jamòn serrano bastante aceptable, que calmaron las ansias de comer. De plato fuerte la paella mixta inigualable tìpica valenciana, que llegò y desapareciò. El Solomillo estaba para pedir otro. El postre aderezado con maracuyà termino con la faena del dìa en forma positiva.

Buen área de estacionamiento, servicio esmerado y gentil. Los platos degustados como entrada de picada de chorizo y morcilla buena para iniciar, los platos fuerte vacío estilo Argentino cocido a 3/4 apetitoso buen sabor, la entraña bien cocida tierna y jugosa comestible totalmento, la guarnición de yuca y patacones suaves y desaparecidos. Los licuados de fresa y maracuyá llenaron su cometido.