Juan Miguel N.
Comensal
Miembro Foodie
10
Puntos
-
Ranking mes
-
Ranking Total
Sobre mí
Miembro desde:
Febrero de 2015
2 comentarios en Panamá
No tiene fotos en panama
Taberna 21 (Via Argentina)
La musica en vivo está de lo mejor! Lastima que me dieron un pimiento podrido en mi paella y los meseros no se hicieron cargo.
Madrigal
Si hay un lugar donde cada cena es una historia diferente y mejor a la anterior, ese lugar es Madrigal, por eso, otra vez llegamos a la calle 5 con la av A donde Andrés nos recibe con una sonrisa y la propuesta de un maridaje de CAVAS de la finca Raventós i Blanc. La mesa es de 10 puestos y la cava donde se propone el maridaje nos espera. El Chef toma un puesto y presenta al enólogo y sommelier Pepe Raventós su familia es la que desde hace tiempo viene cultivando unas de las variedades de CAVA más selectas de España. Pepe presenta a su cómplice de esta noche Chef Andrés Madrigal García y luego cada uno de los comensales nos vamos presentando. La mesa queda así chefs, cocineros, sommeliers, periodistas y amantes del buen comer y beber ansiosos por el maridaje. Empezamos con las otras con toque criollo y pan de centeno acompañadas de la Finca añada 2010 ahí concordamos en que la mineralidad y la frescura eran las que casaban correctamente la primera armonía. Luego siguieron los Pork buns con gel de manzanas y mahonesa de toronja acompañdos del Rosado de Nit añada 2011 donde además de un perfecto maridaje Andrés nos regaló la historia de cómo es que el en su primera llegada a Panamá va al interior, a la provincia de Chiriquí, para tener el primer contacto con el señor que criaba los cerdos, y de cómo lo convenció para que le pudiera vender los lechones. Y si bien el trato quedo en que, un pequeño lechón al mismo precio que el chancho entero que pesaba 5 veces más, después de probar un bocado tierno que se deshace en hilos sublimes de sabor pienso que el chef llego a buen acuerdo. El último maridaje nos trae un taco de pato chiricano y mojo afroantillano con L`hereu añada 2011 que además de ser un maridaje delicioso nos trae consigo la visita improvista de Don Hector, socio de Andrés, que nos cuenta como es que lo conoció en Madrid, en su restaurant, y que por el estilo bohemio y la camisa arrugada de Salvemos a las Ballenas que en ese momento llevaba puesta lo confundió con el lavaplatos y le reclamo que trajera al Chef. La respuesta fue; yo soy el Chef y dueño del local. Don Hector quedo pálido y muerto de pena y quien diría que un par de años después este entrañable par abre Madrigal en Panamá y nos regala experiencias gastronómicas tan extraordinarias como la de está noche. Pero ya paremos de escribir y acaso obviemos la descripción del postre, el café y el final de mi historia y demos espacio a otras pues quizás la tuya sea la próxima en este imperdible rincón del Casco.