Místico es una auténtica joya de la gastronomía. Fuimos para celebrar un aniversario y nos enamoramos del lugar. Además de una acertada carta, la atención de personal fue de primera. Las recomendaciones fueron muy atinadas. comenzamos con quesadillas (extraordinarias) y chicharrón (de muerte lenta). Como platos fuertes, nos fuimos por la entraña y el asado norteño; ambos superlativos, pero, eso sí, el asado es un acierto con un ossobuco que se deshace de lo tierno, acompañado de vegetales y una buena ración de tortillas para armarte tus taquitos. Tienen que probarlo.
Este restaurante sorprende por la calidad de sus platos. Todo estaba delicioso. De entrada nos agasajamos con camarones, gyosas, bolitas de pollo; todo estuvo espectacular. De platos fuertes pedimos varios tipos de ramen e igual de sabrosos. Para los que les guste el picante, el Ramen Volcano es el indicado; el picante es delicioso con un gran equilibrio que no enmascara los otros sabores. Recomendable reservar porque va mucha gente,
Realmente nos sorprendió. El ambiente es realmente hermoso y la atención de todo el equipo es fenomenal. Todo esto se complementa con una amplia carta. Nos decantamos por un sushi tempura para iniciar y estaba delicioso. De platos fuertes, un jugoso y riquísimo Ribeye y un cochinillo perfecto en su cocción. El risotto de acompañante sencillamente perfecto. Un lugar que merece la pena de visitar más de una vez.
Siempre es un deleite darse una vuelta por Gobe. Tienen una carta lo suficientemente variada como para ponerlo a dudar, pero realmente cualquier elección los va a sorprender. Nos decantamos por iniciar con un delicioso Carpaccio y una exquisita Provoleta. Como plato fuerte, los cortes Angus en plancha caliente; la entraña sencillamente perfecta y el bife bastante bueno. Todo lo regamos con cocktail de la casa, de los que no recuerdo el nombre, pero hicieron mella, positivamente hablando, en nuestro paladar. Todo acompañado por una muy esmerada atención de todo el personal.
No hay nada mejor que te reciban con una gran sonrisa, tan grande que puede percibirse incluso con las mascarillas. Si quieren probar exquisita comida koreana, este lugar es una parada obligada. Tienen una carta variada donde se yergue como estrella la barbacoa preparada en tu propia mesa. Todo esto se puede acompañar por fideos, arroz e incluso exóticas sopas. Nuestros saludos a la chef, que hasta tuvo el detalle de salir a agradecernos por la visita, y un reconocimiento muy especial para Jessica que realmente nos hizo sentir como en casa.
Excelente experiencia gastronómica la que tuvimos en Isaki. Pedimos un poco de todo y cada platillo estaba mejor que el anterior. empezamos con unos dumplings de langosta y unas wings. Luego, como plata fuerte, nos deleitamos con una riquísima entraña, una fresca y deliciosa ensalada verde, unas brochetas de pollo exquisitas, todo acompañado por un arroz frito con camarones que estaba para chuparse los dedos y, por último, pero no menos importante, un rollo de sushi flameado en directo y que hizo las delicias de todos. Marinamos las viandas con cócteles con y sin alcohol. como cierre, el chef nos obsequió con un rollo de degustación de atún. Mención a parte merece la atención superlativa de todo el equipo. Realmente un lugar para repetir y altamente recomendable.
Siempre es una opción segura para comer con una hermosa vista de la bahía. Esta vez, nos sorprendió un poco lo lento del servicio, sobretodo por lo vacío que estaba el domingo. Las almejas deliciosas, pero fue un poco chocante el pan de ajo INTEGRAL; suponemos que viniendo del día de la madre no pudieron hacer súper. El pescado entero muy rico y el arroz pencas estuvo superlativo. El flan y el tres leches muy buenos.
Fuimos para el día de las madres. Si algo puede describir la jornada es CAOS!!! Una fila interminable para el buffet. Una organización paupérrima que no consideró la gran cantidad de gente. El buffet ubicado en la misma isla de siempre, con solo una persona en la estación de pasta. En la parte de afuera, los postres, el “fabuloso” menú de niños con papilas fritas y fingers. Una mesa solitaria con algo de desayuno chins y un jamón acompañado con algo parecido a pescado. Realmente, muy decepcionante.
Sencillo, modesto, pero nada carente de sabor y con unos platillos perfectamente balanceados en cantidad, sazón y precio. YOI es una perfecta opción para degustar un pollo frito koreano, pero eso es apenas el principio, por en su menú encontrarán todo tipo de exquisiteces. Hemos probado las alitas, los rollitos, el patacón chino y todo está buenísimo. Altamente recomendable!!!
Nos sorprendió!!! Comida italiana de primera línea, con ese toque Mediterráneo que invita a regresar. Probamos la pasta blanca con salmón, casi sublime. Los rigatoni a la matriciana muy ricos y con el tomate en su punto justo. Pero, lo mejor, el risotto de mariscos, WAO!!! Si tienen la oportunidad, pruébenlo, no los decepcionará.
Místico
Místico es una auténtica joya de la gastronomía. Fuimos para celebrar un aniversario y nos enamoramos del lugar. Además de una acertada carta, la atención de personal fue de primera. Las recomendaciones fueron muy atinadas. comenzamos con quesadillas (extraordinarias) y chicharrón (de muerte lenta). Como platos fuertes, nos fuimos por la entraña y el asado norteño; ambos superlativos, pero, eso sí, el asado es un acierto con un ossobuco que se deshace de lo tierno, acompañado de vegetales y una buena ración de tortillas para armarte tus taquitos. Tienen que probarlo.
Ajisen Ramen (Via Brasil)
Este restaurante sorprende por la calidad de sus platos. Todo estaba delicioso. De entrada nos agasajamos con camarones, gyosas, bolitas de pollo; todo estuvo espectacular. De platos fuertes pedimos varios tipos de ramen e igual de sabrosos. Para los que les guste el picante, el Ramen Volcano es el indicado; el picante es delicioso con un gran equilibrio que no enmascara los otros sabores. Recomendable reservar porque va mucha gente,
Brutto
Realmente nos sorprendió. El ambiente es realmente hermoso y la atención de todo el equipo es fenomenal. Todo esto se complementa con una amplia carta. Nos decantamos por un sushi tempura para iniciar y estaba delicioso. De platos fuertes, un jugoso y riquísimo Ribeye y un cochinillo perfecto en su cocción. El risotto de acompañante sencillamente perfecto. Un lugar que merece la pena de visitar más de una vez.
Gobe
Siempre es un deleite darse una vuelta por Gobe. Tienen una carta lo suficientemente variada como para ponerlo a dudar, pero realmente cualquier elección los va a sorprender. Nos decantamos por iniciar con un delicioso Carpaccio y una exquisita Provoleta. Como plato fuerte, los cortes Angus en plancha caliente; la entraña sencillamente perfecta y el bife bastante bueno. Todo lo regamos con cocktail de la casa, de los que no recuerdo el nombre, pero hicieron mella, positivamente hablando, en nuestro paladar. Todo acompañado por una muy esmerada atención de todo el personal.
Oriental Garden
No hay nada mejor que te reciban con una gran sonrisa, tan grande que puede percibirse incluso con las mascarillas. Si quieren probar exquisita comida koreana, este lugar es una parada obligada. Tienen una carta variada donde se yergue como estrella la barbacoa preparada en tu propia mesa. Todo esto se puede acompañar por fideos, arroz e incluso exóticas sopas. Nuestros saludos a la chef, que hasta tuvo el detalle de salir a agradecernos por la visita, y un reconocimiento muy especial para Jessica que realmente nos hizo sentir como en casa.
Isaki
Excelente experiencia gastronómica la que tuvimos en Isaki. Pedimos un poco de todo y cada platillo estaba mejor que el anterior. empezamos con unos dumplings de langosta y unas wings. Luego, como plata fuerte, nos deleitamos con una riquísima entraña, una fresca y deliciosa ensalada verde, unas brochetas de pollo exquisitas, todo acompañado por un arroz frito con camarones que estaba para chuparse los dedos y, por último, pero no menos importante, un rollo de sushi flameado en directo y que hizo las delicias de todos. Marinamos las viandas con cócteles con y sin alcohol. como cierre, el chef nos obsequió con un rollo de degustación de atún. Mención a parte merece la atención superlativa de todo el equipo. Realmente un lugar para repetir y altamente recomendable.
Pencas
Siempre es una opción segura para comer con una hermosa vista de la bahía. Esta vez, nos sorprendió un poco lo lento del servicio, sobretodo por lo vacío que estaba el domingo. Las almejas deliciosas, pero fue un poco chocante el pan de ajo INTEGRAL; suponemos que viniendo del día de la madre no pudieron hacer súper. El pescado entero muy rico y el arroz pencas estuvo superlativo. El flan y el tres leches muy buenos.
Cafe Bahia
Fuimos para el día de las madres. Si algo puede describir la jornada es CAOS!!! Una fila interminable para el buffet. Una organización paupérrima que no consideró la gran cantidad de gente. El buffet ubicado en la misma isla de siempre, con solo una persona en la estación de pasta. En la parte de afuera, los postres, el “fabuloso” menú de niños con papilas fritas y fingers. Una mesa solitaria con algo de desayuno chins y un jamón acompañado con algo parecido a pescado. Realmente, muy decepcionante.
Yoi (Chanis)
Sencillo, modesto, pero nada carente de sabor y con unos platillos perfectamente balanceados en cantidad, sazón y precio. YOI es una perfecta opción para degustar un pollo frito koreano, pero eso es apenas el principio, por en su menú encontrarán todo tipo de exquisiteces. Hemos probado las alitas, los rollitos, el patacón chino y todo está buenísimo. Altamente recomendable!!!
Stizzoli (12 de Octubre)
Nos sorprendió!!! Comida italiana de primera línea, con ese toque Mediterráneo que invita a regresar. Probamos la pasta blanca con salmón, casi sublime. Los rigatoni a la matriciana muy ricos y con el tomate en su punto justo. Pero, lo mejor, el risotto de mariscos, WAO!!! Si tienen la oportunidad, pruébenlo, no los decepcionará.