El lugar es precioso y la vestimenta tradicional de los meseros es increíble. Hay que reservar con días de anticipación porque suele llenarse mucho.
Fue mi primera experiencia con la comida Tailandesa, y no podía haber pedido algo mejor. No puedo comer picante, pero la mesera que nos atendió fue muy amable al explicarme las opciones que habían para mi, incluso adaptando platos.
Sale mejor pedir varios platos para compartir, ya que viene bien servido y todo es increíblemente delicioso. Nos comentaron que tenían cocineros Thai.
Es algo costoso, pero la experiencia vale la pena en todo sentido. Definitivamente es uno de mis restaurantes favoritos.
Fui por el cumpleaños de una amiga por primera vez, y no pienso volver. Llegamos y el lugar no estaba organizado para la cantidad de comenzales que fuimos, los meseros ausentes y terminamos acomodando el lugar nosotros mismos.
Aquí encuentras dos polos opuestos: los platos son insípidos, o con uno o dos ingredientes saturados que te opacan el resto de los sabores.
La mesera cada vez que la llamabas te decía que ya iba y se desaparecía sin traerte lo que se había pedido. Demasiado lento el servicio, no están pendientes, y pedantes al servir los tacos tipo "eat all you can" porque si no comes mínimo 5, te los cobran no sé cuánto. Entiendo su política, pero no agradezco que me lo recuerden cada vez que me vean, mi ritmo al comer me lo impongo yo, no la mesera.
Buen ambiente, servicio normal, pero la comida me parece que últimamente está insípida, o pasada de algún ingrediente (sal, casi siempre), no se justifica la relación calidad-precio.
Es uno de los mejores restaurantes de comida japonesa, más que nada por la inmensa variedad del menú, y el hecho de que la mayoría de los platos son muy apegados a los originales (en este lado del charco se "americanizan"mucho las recetas).
La atención es buena, pero tiene mucho que mejorar. El precio algo caro para lo que es.
Lastimosamente después de tantos años frecuentando su comida, ya no me provoca para nada ir.
La gota que derramó el vaso fue cuando subieron los precios de los platos, la calidad de los mismos (que tiene como el año viniendo en picada) no lo justifica ni de chiste. Pedir Yakisoba aquí es jugar ruleta rusa... un día está completamente seco, otro día se pasan de sal, y lo más raro es poder probarlo y decir "sabe normal". Los sushis no son frescos, me ha tocado que han usado aguacate tan verde que está duro, e incluso que se les pase ponerle algún ingrediente clave al roll, como el mismo pulpo, o cangrejo.
La verdad no tengo idea que ha pasado con este restaurante, pero económico ya no es.
Los pita pockets, waffles y crepas, tanto salados como dulces son muy buenos. Una de las cosas que más me gustan de Crepes & Waffles es la gran variedad que ofrece su menú. Los postres también son muy ricos.
Algo que he notado en mis últimas visitas es que el servicio ha mejorado, aunque todavía les falta agilizar un poco la salida de los platos de la cocina.
La primera vez que fui la comida me pareció buena, pero la ensalada griega dejó que desear. También he pedido a domicilio pero demoran mucho independientemente de que vivo cerca, y la comida llega fría y mal empacada.
Otra cosa tienen es que un día la comida es normal, y otro día es mala, no hay consistencia en el sabor; no provoca arriesgarse.
Don Lee lastimosamente va en picada, hace años todo era bastante bueno, sin embargo ahora muy pocos se salvan, entre esos están la carne con hojas de mostaza, el puerco liso y el dim sum.
Hoy en día las costillas agridulces parecen de cemento, además de que sirven poquísimo para el precio tan elevado que tienen; los camarones apanados de terror, no los limpian nunca, no los recomiendo por nada del mundo.
El servicio a domicilio no baja de una hora para hacer las entregas independientemente de que tan cerca este uno, y el servicio tanto del call center como del restaurante dejan mucho que desear. De verdad me apena que este restaurante haya decaído tanto.
Me encanta Athen's, y desde que cambió a Panos creo que han mejorado. De los mejores restaurantes griegos que hay, con tremendas pizzas también; si quiero comer más sano tengo una buena selección de ensaladas con deliciodo tzatsiki para escoger.
Bastante económico, buena comida y bien servido. Lo único que necesitan mejorar urgentemente es el servicio, las meseras andan en su mundo y no están pendientes.
Las alitas son muy ricas y hay bastante variedad de salsas. Los camarones son igual de buenos y las hamburguesas casi sin grasa.
Hace poco sacaron torrejitas de maíz de acompañamiento y se han vuelto mis favoritas.
El servicio a domicilio es de los más rápidos, aunque jamás he sido de comer en el restaurante porque no me gusta el ambiente.
Thai Garden 2112
El lugar es precioso y la vestimenta tradicional de los meseros es increíble. Hay que reservar con días de anticipación porque suele llenarse mucho. Fue mi primera experiencia con la comida Tailandesa, y no podía haber pedido algo mejor. No puedo comer picante, pero la mesera que nos atendió fue muy amable al explicarme las opciones que habían para mi, incluso adaptando platos. Sale mejor pedir varios platos para compartir, ya que viene bien servido y todo es increíblemente delicioso. Nos comentaron que tenían cocineros Thai. Es algo costoso, pero la experiencia vale la pena en todo sentido. Definitivamente es uno de mis restaurantes favoritos.
Aonde Chencho
Fui por el cumpleaños de una amiga por primera vez, y no pienso volver. Llegamos y el lugar no estaba organizado para la cantidad de comenzales que fuimos, los meseros ausentes y terminamos acomodando el lugar nosotros mismos. Aquí encuentras dos polos opuestos: los platos son insípidos, o con uno o dos ingredientes saturados que te opacan el resto de los sabores. La mesera cada vez que la llamabas te decía que ya iba y se desaparecía sin traerte lo que se había pedido. Demasiado lento el servicio, no están pendientes, y pedantes al servir los tacos tipo "eat all you can" porque si no comes mínimo 5, te los cobran no sé cuánto. Entiendo su política, pero no agradezco que me lo recuerden cada vez que me vean, mi ritmo al comer me lo impongo yo, no la mesera.
Siete Mares
Buen ambiente, servicio normal, pero la comida me parece que últimamente está insípida, o pasada de algún ingrediente (sal, casi siempre), no se justifica la relación calidad-precio.
Matsuei
Es uno de los mejores restaurantes de comida japonesa, más que nada por la inmensa variedad del menú, y el hecho de que la mayoría de los platos son muy apegados a los originales (en este lado del charco se "americanizan"mucho las recetas). La atención es buena, pero tiene mucho que mejorar. El precio algo caro para lo que es.
Sushi Express (Punta Pacifica)
Lastimosamente después de tantos años frecuentando su comida, ya no me provoca para nada ir. La gota que derramó el vaso fue cuando subieron los precios de los platos, la calidad de los mismos (que tiene como el año viniendo en picada) no lo justifica ni de chiste. Pedir Yakisoba aquí es jugar ruleta rusa... un día está completamente seco, otro día se pasan de sal, y lo más raro es poder probarlo y decir "sabe normal". Los sushis no son frescos, me ha tocado que han usado aguacate tan verde que está duro, e incluso que se les pase ponerle algún ingrediente clave al roll, como el mismo pulpo, o cangrejo. La verdad no tengo idea que ha pasado con este restaurante, pero económico ya no es.
Crepes & Waffles (Marbella)
Los pita pockets, waffles y crepas, tanto salados como dulces son muy buenos. Una de las cosas que más me gustan de Crepes & Waffles es la gran variedad que ofrece su menú. Los postres también son muy ricos. Algo que he notado en mis últimas visitas es que el servicio ha mejorado, aunque todavía les falta agilizar un poco la salida de los platos de la cocina.
Greek Chik
La primera vez que fui la comida me pareció buena, pero la ensalada griega dejó que desear. También he pedido a domicilio pero demoran mucho independientemente de que vivo cerca, y la comida llega fría y mal empacada. Otra cosa tienen es que un día la comida es normal, y otro día es mala, no hay consistencia en el sabor; no provoca arriesgarse.
Don Lee (Bella Vista)
Don Lee lastimosamente va en picada, hace años todo era bastante bueno, sin embargo ahora muy pocos se salvan, entre esos están la carne con hojas de mostaza, el puerco liso y el dim sum. Hoy en día las costillas agridulces parecen de cemento, además de que sirven poquísimo para el precio tan elevado que tienen; los camarones apanados de terror, no los limpian nunca, no los recomiendo por nada del mundo. El servicio a domicilio no baja de una hora para hacer las entregas independientemente de que tan cerca este uno, y el servicio tanto del call center como del restaurante dejan mucho que desear. De verdad me apena que este restaurante haya decaído tanto.
Athen`s Pizza (Marbella)
Me encanta Athen's, y desde que cambió a Panos creo que han mejorado. De los mejores restaurantes griegos que hay, con tremendas pizzas también; si quiero comer más sano tengo una buena selección de ensaladas con deliciodo tzatsiki para escoger. Bastante económico, buena comida y bien servido. Lo único que necesitan mejorar urgentemente es el servicio, las meseras andan en su mundo y no están pendientes.
Wing Zone (San Francisco)
Las alitas son muy ricas y hay bastante variedad de salsas. Los camarones son igual de buenos y las hamburguesas casi sin grasa. Hace poco sacaron torrejitas de maíz de acompañamiento y se han vuelto mis favoritas. El servicio a domicilio es de los más rápidos, aunque jamás he sido de comer en el restaurante porque no me gusta el ambiente.