Llegamos justo a la hora de cerrar pero igual nos atendieron sin problema. Pedimos de entrada Brie con miel y almendra y estaba delicioso aunq la canasta de pan estaba pobre. De plato principal pedimos gnocci con cordero (se supone q toma nueve horas hacerlo) y una pizza de prosciutto y todo estaba demasido delicioso. Las porciones son grandes y todo estaba excelente. Lo recomendaria 200%.

No se si fue solo a mi que le paso o que..pero pagar 12.50 por una porcion diminuta de salmon sin mas nada me parece exagerado. Si hubiese estado acompanado de algo incluido en el precio me pareceria un precio justo o si el salmon hubiese estado mas grande tambien me pareceria justo...pero cuando me trajeron el salon que estaba cual llanero solitario en medio del plato, la verdad es que senti estafada. El ambiente esta bien, el servicio mas o menos. Por lo menos yo no me siento con animos de regresar. A todo esto pedi una ensalada de acompanamiento que estaba bien.

Yo he ido varias veces a este restaurante. La comida realmente no es excepcional, pero para ir a tomar un vinito y comer quesos, es buenisimo. La ultima vez que fui, pedimos un fondue de queso, ya que tenia que sacarme la espinita de encima. Haber estado en Paris una semana y no haber podido probar el fondue :( . Que por algun extraño complot de la vida no lo habia podido hacer hasta ahora! Que delicia! Me encanto su mezcla de vinagro balsamico con aceite de oliva y especias para remojar el pan. Lo negativo: Como dije la comida no es muy buena, la seleccion de vinos y queso si lo es! La musica podrian bajarla un poco y los meseros podrian ser un poco mas amables. Y la decoracion, estaba bien para hace 10 o 15 años atras... pero creo que deben hacer una renovacion sin salir de su estilo campina mediterranea.

Siempre habia querido ir a Manolo Caracol, pero no habia tenido la oportunidad. El ambiente es informal medio bohemio, medio chic. La decoracion me gusto, y el mecero pregunto que si ya sabiamos como funcionaba el sistema, pero mi acompanante le indico que si (El si ha sido comensal en el restaurante). Para los que les gusta llenarse hasta decir no mas, este lugar no es para ellos. Este lugar es para tener una buena conversacion mientras traen poco a poco los platillos. Casi como si fuera el sistema de tapas pero mas eleborado. La cantidad de comida en cada plato es suficiente para degustarlo bien y quedar satisfecho a la final de la jornada. Te van trayendo los platos poco a poco. Tengo que decir que la comida estaba bien, pero nos sirvieron un caldito de mariscos que mama mia! Que cosa mas deliciosa! Tenia ganas de pedir toda la sopa en existencia y llevarmela a la casa. El postre estaba rico y la presentacion muy linda. Tomamos una botella de vino. Yo si regresaria. Lo que no me gusto es que el ruido estaba un poco excesivo y no se podia conversar muy bien.

Yo habia leido mucho sobre este restaurante y algunas personas me habian dado buenas recomendaciones. Al saber que tenian una hamburguesa sin carne pero con hongos Portobelo enloqueci y me dije que tenia que ir a probarla. No soy vegetariana pero me gustan los hongos Portobelo. Aproveche una noche que pasaba por alli para pedir la hamburguesa para llevar. El ambiente es informal pero precisamente esto es lo que te relaja. El mesero fue muy muy atento y me explico todo muy bien y creo que me dio todos los folletos que tenia. Me dijeron que podia escoger entre papas fritas y aros de cebolla y escogi los aros de cebolla y por supuesto mi hamburguesa Mucho Mushroom. Lo mejor llego cuando finalmente llegue a mi casa y me comi mi tesoro....solo puedo decir DELICIOSO...creo que jamas me devore una hamburguesa tan rapido. Generalmente lo que mas odio de las hamburguesas es el pan pero este pan esta super facil de comer. Supe que era un exito cuando no extrane la carne para nada. Y para rematar, esos fueron los mejores aros de cebolla que he probado en Panama! Crujientes, frescos, ricos. Definitivamente voy a regresar y voy a regrear para probar el open mini hamburguesas. Se lo recomiendo!!!! Lo unico que deseo es que jamas bajen sus estandares de calidad y porciones como pasa en muchos restaurantes en Panama luego de ser famosos.

Fuimos para el cumpleanos de mi mama. Como queriamos el area de Tepanyaqui y al llegar no estabamos todos. Decidimos ir a la barra interna. Pedimos unas margaritas pero nos dijeron que no tenian licuadora (no entendi como un bar no tiene licuadora), Pedimos unos mojitos y no tenian hierba buena. A las finales pedimos un cosmopolitan y otro trago cuyo sabor no era extraordinario y la presentacion pobre. No lo decoraron con absolutamente nada. Cuando ya estabamos completo nos pasaron al area de Tepanyaqui. El show fue super entretenido. El chef interactuo mucho con nosotros y le pidio a algunos tratar de repetir sus proezas. La comida estaba bien pero no extraordinaria. En resumen, Benihana es un restaurante bueno para ir en familia a ver el show del chef. Pero no para degustar una buena comida, ni para tomar unos buenos cocteles.