No entiendo cómo siguen abiertos. Será por bobos como yo que aún van ocasionalemente. 63 dólares por persona por compartir 1 chilaquiles, 2 pinches margaritas y un queso fundido. Sentado afuera en el balcón público. Adentro, el restaurante vacío.

La comida y el ambiente bueno pero los precios están totalmente desmedidos. Cualquier proteína no baja de $25, que en un restaurante como éste es una exageración.

La comida muy rica. Pedimos varios cebiches y todos estuvieron deliciosos, especialmente el frito. Menú bastante variado pero muy tradicional. Ambiente bueno, no es lujoso pero los precios ok, especialmente con el descuento de Degusta. Recomendado.

Bajo nueva administración, volvieron a ser lo que eran hace tiempo atrás. La comida muy buena, buena atención, y los precios buenos si vas con el descuento de Degusta. Los precios regulares del menú los encuentro altos, aunque la comida esté buena: $19-20 por un cebiche es alto en cualquier lugar.

Está OK, pero en mi opínión, no "espectacular" ni "increíble" como otros lo describen aquí. Pedí una hamburguesa Belisario y estaba igual de buena que en otros burger joints de la ciudad, con precios similares, ni más ni menos. Las hamburguesas no eran como la de la foto en el perfil de Degusta porque el pan no tenia ajonjolí. El servicio fue muy atento y tanto la dueña como la mesera se esfuerzan por complacerte y son muy atentas, pero al ambiente le falta. Sillas de madera duras, rectas e incómodas, y entre la bulla de la música y el rugir de los abanicos gigantes, es difícil hablar a voz normal (no entiendo cuál es "el concepto" que otros mencionan? esto es igual que comer en el Peskito o el Chombo Williams, que no tienen nada de malo, pero difícilmente son "conceptos"). Era de noche y había bastante estacionamiento en los oficinas vecinas.

Primera visita. Habíamos visto los buenos comentarios en Degusta. Fuimos 4 personas. Compartimos de entrada unas croquetas mixtas y unas papas bravas con pulpo que estuvieron muy buenas. Una ración de camarones al ajillo aparte estuvio un poco bajo de sazón, pero llegaron bien calientes. De plato fuerte, una corvina y dos ossobuccos sobre rissotto estuvieron buenos. Pedimos además una carta en salsa de pizza que no gustó mucho: la salsa de tomate un poco dulce y mucha cebolla gruesa, aunque la calidad del queso estuvo muy buena. Nos gustó mucho el ambiente; ambiente sereno para adultos, con música a volumen decente, decorado con buen gusto y la atención fue muy buena. Buena selección de vinos, y los precios estaban razonables para ser un restaurante español. Los precios de los platos fuertes oscilaban entre $15 y $22-23.

Brutal sabor. El pollo está delicioso, y viene acompañado de espumas de ajo y de culantro. Pida el puré de yuca con mojo y los frijoles negros.

Tenia rato de no ir por allá. Cuando vi los precios del menú casi me caigo para atrás. Casi todos los platos de carne costaban 25 dólares o más (el cuento de la carne "importada", pero no te dan opciones dizque "locales"). Por 25 dólares el plato, prefiero ir a in restaurante de primera, no a tragar humo ni a escuchar los pitazos y aplausos de los múltiples cumpleaños que les celebran a los comensales, como si estuvieras en Friday's. En resumen, la comida es rica y el servicio es bueno, pero no valen esos previos estratosfericos.

No sé qué le ha pasado a este gente pero se les fue la mano con los precios. Fui con mi esposa a picar y tomarnos una margarita. Cada uno tomó 1 y después compartimos otra (3 total), pedimos 1 queso fundido simple, 1 guacamole y 2 frijoles refritos, y la cuenta fue 63 dólares. Con la propina, la "picada y margarita" costó 35 dolares por persona, una EXAGERACIÓN. No creo que volveré.

Encuentro deliciosas las sopas y rollos de vegetales al vapor, sobre todo el Pho Ga, que trae bastante pollo de carne blanca. Las Pho tienen muy buen sabor, caen ligeras pese a sus grandes porciones, y la presentación de los platos es poco pretenciosa pero agradable a la vista. El ambiente es muy sencillo pero los precios son buenos para lo que se recibe, así que OK. Recomiendo pedir las Pho con fideos delgados, que son más fáciles de comer. Un sabroso saca-apuro para almuerzo o domingo en la noche, cuando el estacionamiento es abundante y seguro.