Chin Chin me parece un restaurante interesante con una propuesta asian fusion innovadora y diferente. Todos los platos tienen un presentación colorida y appetitosa, y el lugar en si tiene una decoración muy fantaseosa y chevere. Yo probé varios platos; la entrada de moo shu pork, el arroz frito de chin chin, el pollo general tso, y de postre de mil hojas de té verde. Todo estaba rico, solo el pollo un poco salado. Sin embargo, mi comentario es que el lugar esta muy costoso para lo que es la comida. Por mas que los platos sean buenos y de buena porción, me parece que los precios son exagerados. Ciertamente es un lugar que vale mas la pena ir y compartir los platos estilo tapas y asi probar bastantes platos.

El concepto de esa flaca rica es sencillo y lo hacen muy bien: buenas hamburguesas con ingredientes variados, frescos, sin mucho complique o exageración. Es un buen lugar para estar comiendo con amistades al aire libre, en un ambiente relax. Las papas son crocantes, livianas y sabrosas, y ademas sirven buenas porciones. Yo probé la debutonta, que me fascinó; la carne jugosa, el queso apanado sabroso pero no se apoderaba de la hamburguesa. Mi pareja probó la putin, tambien una buena opción. Sin duda volvere a conocer las demás "flacas."

El ambiente del restaurante es llamativo y chevere. No pedí ninguna de las entradas, pero si probé tres pizzas diferentes y quede con ganas de volver. Probé la pizza bianca trufada, la quattro stagioni, y la pequeña italiana. La trufada y la italiana estaban deliciosas, la masa de pizza es liviana y de excelente grosor, y la salsa de tomate que utilizan se siente liviana y sabrosa. La quattro stagioni no me convenció, pero igual quede con ganas de probar mas. Lo único que no me agrado tanto fue que el servicio esta un poco lento y perdido a veces, pero nada que no puedan mejorar.

Casa Stizzoli es una gema de cocina Italiana en Panamá. El lugar es precioso, con interiores que invitan a pasar un rato agradable con seres queridos. He probado varios platos distintos del menú, y todos han superado mis expectativas. La comida se siente autentica, casera, y al mismo tiempo presentan platos elevados que rompen los esquemas de lo tradicional en la gastronomía italiana. En lo personal recomiendo la bucatini all'amatriciana, la pizza paradiso, la pasta paccheri mediterráneo, y de postre, sin duda el tiramisu, que viene siendo uno de los mejores que he probado en el mundo. El servicio es agradable, y la mixologia tampoco se queda atrás; preparan del mejor Aperol Spritz que he bebido. Tienen ademas una excelente selección de vinos para acompañar las comidas. Si bien el precio es elevado, para mi, la comida lo vale.

Ame este lugar! Es una propuesta innovadora y divertida en postres, y el servicio es amable. Fuí a probar los waffles y el helado de matcha, y eran deliciosos. El helado de matcha esta entre los mejores que he probado, y el waffle de matcha tambien era liviano y riquísimo. Sin duda volveré!

Salvaje tiene un ambiente divino, con tanta decoración natural, es un restaurante perfecto para una cita romántica. Varios platos me impresionaron, como los dumplings de trufa y el arroz con pato, pero habían otros que eran regulares como el sushi. Los cocteles artesanales son deliciosos pero de precios exagerados. En general, me parece que eso aplica para el restaurante en sí. La comida es buena, pero en muchos casos no me parece que vale el costo.

Azahar es una joya de restaurante en Panamá. El servicio es muy amable y pendiente, y el ambiente agradable, con una decoración ecléctica que va de mano con la comida. En esta oportunidad solamente deguste los platos de entrada, estilo tapas, y todos fueron deliciosos. En particular recomiendo los Rock Prawn Sliders, el Terminator Roll, y el Mr. Miyagi Roll. Adicionalmente, los cócteles son interesantes y presentan un complemento perfecto a los platos. En mi caso probé el Smokey Rum, que es un poco fuerte pero perfecto para alguien amante del ron, y el Azahar Spritz, que era liviano, fresco, y dulce. No tengo queja con Azahar, con la excepción de dos incidentes un poco curiosos; al inicio, nos presiono un poco el mesero que debemos pedir todos los platos que deseábamos, en vez de proceder con las entradas y luego volver por platos principales. No fue de mala manera, pero si un poco extraño, ya que el comensal esta pagando por disfrutar su comida a su tiempo. Segundo, al final de la comida, cuando ya habíamos solicitado la cuenta, nos pidieron desalojar la mesa para otros comensales que estaban esperando. Eso si, nos brindaron asientos en la área lounge con una copa de espumante gratis, pero ya que nosotros habíamos pedido la cuenta para poder partir, me pareció una actuación innecesaria. En resumen, es una experiencia deliciosa y por lo general placentera y sin duda volveré.

Lo primordial de un restaurante de carnes es saber cocer la carne al termino correcto, y/o deseado por el cliente. Si no pueden hacer eso, lo demas es irrelevante. Yo pedi mi filete de res y entraña al termino medio, ambos llegaron bien cocidos. Por mas que el sabor estaba bueno, se pierde todo el jugo y la calidad de la carne al no cocinarlos correctamente, especialmente no respetando los deseos del cliente. Ironicamente, lo que mas me gusto fue el batido de maracuyá y las picadas; el guacamole y las tortillas.

Lo que mas me impresionó de este restaurante fue el ambiente y la decoración. Muy chevere la vibra, y seguramente para ir de noche a tomarse unos coctéles con picadas esta excelente. Yo fui de almuerzo, y probe la pizza Little Italy y el plato estrella del local, la Fiera York pizza. Ambas tenían una masa deliciosa; fresca, sabrosa y liviana. Sin embargo me hizo falta un poco mas tomate y queso, lo cual hacia las pizzas levemente secas. En general el sabor fue bueno. Las Bag fries (papas trufadas) estaban excelentes, y los coctéles de Fiera Mule y Ginger Aperol Spritz muy bien hechos.

Los Tarascos es un lugar curioso, ya que parece un estacionamiento con comida rápida. La comida en si la sirven rápidamente, un plus, pero lo sorprendente es que la comida es muy rica. Los tacos al pastor vienen en porciones agradables y la carne es jugosa y sabrosa. El menú es descomplicado y todo sabe fresco y ligero. Probé la horchata, lastimosamente no me encanto por la textura, pero el sabor era rico. Ciertamente volveré a probar mas platos de su menú!