Fui con mi esposo porque teníamos antojo de pasta y pizza. Realmente no nos mató. Desde que llegamos, el restaurante adentro estaba lleno de humo. Y obviamente quedamos prendidos en comida al salir. De entrada pedimos ls carimañolas, estaban ok. De platos fuerte pedimos una pizza con rúcula, champiñones y prosciutto; la pasta la armamos: pedimos gnocchi en salsa rosé gratinado con mozzarella. La pizza estaba ta delgada que estaba super tostada y simplona. El gnocchi estaba bueno y al dente, pero el sabor del queso gratinado estaba raro. Sabía como a quemado pero no estaba completamente derretido. Me dio la impresión que lo “gratinaron” con un soplete de cocina. FATAL.

La comida muy buena. Pedí ceviche de maracuyá y me encantó. Tiene trocitos de mango. También el fish taco con la salsa tártara deliciosa. Definitivamente regresaré.

Buen ambiente. Es un restaurante de tapas, por lo que es un lugar para ir con amistades a picar y a tomarse algo.

Realmente puede ser un buen lugar para ir un sábado pero la música la ponen ALTÍSIMA y es MALÍSIMA. Es imposible conversar o que los meseros escuchen tu pedido. La comida es buena pero el servicio es PÉSIMO. Cada vez que vamos, para pedir la cuenta tenemos que levantarnos e ir a la caja a pagar. Hemos ido en otra ocasión un domingo y sucede lo mismo. El ambiente NO es para ir con niños. Música altísima y cigarrillo por todos lados. Deberían seccionar áreas para gente que quiera fumar.

Tenía altas expectativas ya que me habían dicho que la comida era diferente a la tradicional de los otros restaurantes del Trapiche. Fuimos en familia. Para compartir, pedimos la picada mixta pequeña. Que de pequeña no tenía nada. De platos fuertes, mi esposo y yo pedimos el emparedado de panza y el gallo pinto para compartir. Me gustó mucho el emparedado de panza. El guacho estaba rico pero he probado mejores. De beber, tomamos la cerveza de la casa, el cutarrazo. Muy buena.

Fui a almorzar un domingo con mi familia. Pedimos de entrada fish tacos y arañitas, plato fuerte: 4 pulpos y 2 filete de pescado apanado. Por ser domingo no había variedad en el menú. La comida estaba bien pero el servicio en verdad es pésimo. Demoraron mucho en traer la comida y hasta el flan de postre parecía que lo estaban haciendo en ese momento. El ambiente es playero pero el volumen de la música es ALTÍSIMO. Tanto que no podíamos escucharnos al hablar.

Los sigo desde su local anterior. Me encantan todos los postres. En especial los Blondies. Son una delicia. Ahora que se mudaron a un local más grande, están ofreciendo comida salada. Todo exquisito. Recomendadísimo!!!

Fui con mi esposo y pedimos ceviche frito, ceviche Mr Coco y Ají de gallina. Todo estaba bueno mas no excelente. Con el ají de gallina se demoraron 3 minutos. Por lo cual recomiendo pedir solamente ceviches. El ají y ceviche frito estaban salados. Adicional, la extracción del restaurante no es muy buena y hasta nos ardían los ojos. Los meseros tuvieron que abrir la puerta del local para airearlo. Pedimos suspiro limeño y no había, siendo éste un restaurante peruano.

A mi esposo y a mí nos encantan las pizzas y pastas de este restaurante. Hemos ido en varias ocasiones. Esta vez pedimos pizza amatriciana y ravioli de hongos porcino en salsa rosada para compartir. Deliciosas. Lo único que nos incomoda un poco es tener a los meseros “encima” de nosotros ya que no podemos ni conversar. Nos parece que la atención es excelente pero un poco exagerada.

Casi siempre que tengo que ir a Albrook mall paso a tomar un capuccino. El cafe es delicioso, pero los dulces no se sienten tan frescos. En general, es un lugar agradable para tomar cafe y picar algo.