Siendo 3 personas pedimos parrillada Diabla por recomendación de la mesera que alcanzaba para 3 ó 4, y tristemente quedamos con hambre y somos de poco comer, para que se den una idea de lo pequeña que era la parrillada, pero no pudimos pedir nada mas porque la chica nunca regreso a la mesa, ni a traer la cuenta, debimos pararnos e ir a la caja. No creo que regrese, ni lo recomiendo.