La Jarana

Pedimos una jalea de mariscos y arroz chaufa. Los platos alcanzan para varias personas, por sus porciones generosas. El pedido demoro, la atencion regular. Lugar pequeño.

Excelente lugar super accesible en cuanto a precios la comida es super rica, lo unico que el lugar es un poco pequeño y hay que esperar afuera que se desocupen mesas.

Este fue el primer restaurante que Cómo en Panamá y me encantó y en mi trabajo siempre hay una excusa para comer aquí

comía en la jarana casi todas las semanas, porque me quedaba al lado de mi casa, así que conozco muy bien la sazón y la presentación de sus platos. Hoy pedí lo de siempre (ceviche frito y lomito salteado) y debo decir que me lleve una ligera decepción. empezando por el ceviche frito: cambiaron el empanizado y la sazón no sabe a nada (inclusive me atrevo a decir que se les quedó más tiempo del debido en el aceite) y las yuquitas parecen de paquete (no esperes tu yuca frita de siempre). el lomito salteado: la carne dura, las papas corte muy grueso y se sentía cruda el centro y la sazón totalmente distinta (me atrevo a decir que tenía un sabor parecido al bistec que te sirven en un restaurante chino) en fin, que si esperas tu clásico confort Food peruano y con tu buena porción, ya no lo vas a encontrar. No digo que sea malo, tampoco digo que sea bueno, simplemente ya no es lo mismo.

El sitio parece una fonda, sin ningún tipo de pretensión, pero la comida es espectacular muy buen sabor y en porciones súper generosas. Siempre será una buena opción para comer bien con buen sabor peruano