Casa Stizzoli

Este lugar me parece muy bien para ir en pareja. Excelente ambiente y la comida fresca en buen tiempo. De entrada una burrata con ensalada y plato fuerte pasta.

Conocimos Casa Stizolli en primer lugar felices de que ahora esten mas cerca con su increible cocina! Tengo que decir que hay varios aspectos que afinar que nada tienen que ver con su cocina que es deliciosa!!! En primer lugar llegamos un Domingo a las 12:30m y eramos los unicos. En lugar de hacernos sentir bien atendidos. Se paran a ver.... pensando... que mesa nos podrian asignar... el mesero nos pide que vayamos a una pero nosotros escojimos otra igual de 4 puestos y el insistia en que nos debiamos sentar donde el decia. Le dije queremos comer aqui. Y me dice estan reservadas. no dice nada. Nos sentamos. Luego viene el maitre a explicarnos que si llegase a venir 4 grupos de 6 personas entonces el uniria las mesas etc etc etc. Le dije Sr. Vamos a almorzar en esta mesa y cuando terminemos aun habra espacio en el restaurant ya que somos la 1era mesa. En fin. No hagan eso!. Que el cliente se sienta a gusto es lo primero! Tambien tengo que decir que las mesas no estan vestidas. Osea como si no estuvieses esperando comenzales. ni maltel aunque sea individual, ni cubiertos, ni vasos, ni nada! No traen ni agua ni pan! Nada. La comida buena como siempre. Pero señores atencion con el servicio y como se proyectan al cliente. Gracias a Dios Andrea nos atendió bien despues de todo. Otra cosa que me parece innecesaria es que obliguen al cliente a usar el valet parking. Entiendo que se use si esta full o si el cliente lo desea pero estando solo bien me puedo estacionar y no obligarme a hacer uso de el. En fin ojala mejoren estos detalles ya que la cocina lo merece.

Casa Stizzoli es simplemente un excelente restaurante. La calidad y el buen sabor de sus platos combinados con el ambiente del lugar y la decoración son la combinación perfecta para una velada. Les recomiendo guardar espacio para el tiramisu.

Siento que más que la calidad es moda este restaurante. Pedimos entradas, plato fuerte y un postre que tenía un sabor fatal y como a recalentado. Realmente nada estaba wow. Todo normal, fuimos una noche que no había mucho movimiento. El restaurante está muy bonito, la atención es inmediata y un poco excesiva para mi gusto, se paran como estatuas detrás de las mesas cerca del área de meseros. Eso me pareció un poco incomodo. Realmente no me mato.

Hermoso lugar, buen servicio, opciones variadas en el menú, ricas pizzas y pastas, definitivo un lugar para regresar con amigos, familia o almuerzos de trabajo!