Blas D.
Comensal
Miembro Foodie
3
Puntos
999+
Ranking mes
999+
Ranking Total
Sobre mí
Miembro desde:
Marzo de 2016
Posición 74810 del ranking de calificadores de Panamá.
2 comentarios en Panamá
No tiene fotos en panama
Parrillada Martin Fierro
Sin mucha bulla ni propagandas, este es el mejor restaurante en Panamá para comer carnes, tanto nacionales como importadas de Estados Unidos. Cava surtida con vinos de buena calidad, y para todos los bolsillos.
Grapes
Al llegar no existía registro de la reservación que habíamos hecho y que Degusta había confirmado a mi correo. La comida no es nada del otro mundo. Los nombres de los platos en el menú son muy sugestivos y prometedores. Cuando llegan (salvo el carpacio de res que sí lo era), resultan comunes y corrientes pero caros. Todo hubiera sido más o menos si no hubiéramos tenido el terrible contratiempo al momento de pagar la cuenta. Éramos dos parejas, todos con la edad suficiente para ser favorecidos por la Ley de la Tercera Edad, y el consiguiente descuento que dicha Ley ordena. Entregamos nuestros documentos. A los quince minutos fuimos informados que la única persona que podía autorizar el descuento no se encontraba en el local, pero que venía en camino. A la media hora, la situación era la misma. Transcurridos unos 40 minutos, y como quiera que teníamos cita en otro lugar, les avisamos que si en 5 minutos no nos traían la cuenta nos tendríamos que retirar. En ese momento nos trajeron una cuenta hecha en un papel común y corriente. Reclamamos que lo legal era una factura fiscal. Como la única persona autorizada para dar el descuento seguía ausente, decidimos retirarnos, muy contrariados. Con uno de los saloneros dejamos una hoja con nuestro nombre y teléfonos para que se nos llamara. Eso fue anoche, sábado 12 de marzo. Espero la llamada para darle instrucciones de donde llevar la factura fiscal con el descuento y proceder a cancelar lo consumido. Uno de los saloneros nos dijo que el dueño les haría pagar a ellos. Me parecería muy injusto que así fuera. Si no recibo la llamada, aunque signifique tener que perder tiempo valioso, pondré mi queja oficial ante la ACODECO por lo del descuento, y ante las autoridades encargadas de velar porque los establecimientos provean al cliente de una factura fiscal. Por mi parte, no volveré nunca más al restaurante Grapes.